El informe ‘Directrices de buenas prácticas de 2025 para el Código de Conducta de la UE sobre eficiencia energética de los centros de datos’, publicado por el Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea, es un documento de referencia para ayudar a los operadores de centros de datos a identificar e implantar medidas para mejorar la eficiencia energética de sus centros de datos. Contiene una lista de las buenas prácticas de eficiencia energética identificadas y reconocidas en el Código de Conducta como la reutilización del calor residual de los centros de datos, una buena selección de equipos de energía, una estrategia de monitoreo de energía o la utilización de equipos informáticos como factor clave para optimizar la eficiencia energética del centro de datos.

La lista de buenas prácticas proporciona una terminología y un marco de referencia comunes para describir una práctica de eficiencia energética, ayudando a evitar dudas o confusiones terminológicas. Los clientes o proveedores de servicios de TI también pueden encontrar útil solicitar o proporcionar una lista de las Prácticas del Código de Conducta implementadas en un
centro de datos para facilitar la contratación de servicios que cumplan con sus estándares ambientales o de sostenibilidad.
Este documento también sirve de referencia para el Acto Delegado de Taxonomía para la mitigación del cambio climático en centros de datos y se menciona en el artículo 12 de la Directiva de Eficiencia Energética.
Buenas prácticas de eficiencia energética
A cada práctica se le ha asignado un valor cualitativo que indica el nivel de beneficio esperado de una acción y las prioridades relativas que deben aplicársele. El documento recoge la selección e implementación de nuevos equipos de TI, la selección adecuada del hardware y los métodos de implementación pueden generar ahorros significativos a largo plazo. Por su parte, la refrigeración del centro de datos supone con frecuencia la mayor pérdida de energía de la instalación, y por ello representa una oportunidad importante para mejorar la eficiencia.
En cuanto a los ajustes de temperatura y humedad, ampliar el rango de humedad establecido puede reducir la carga del humidificador. El informe recomienda revisar y abordar los problemas de gestión del aire.
El documento indica que cuando se utiliza refrigeración como parte del diseño del sistema de enfriamiento, se debe seleccionar una planta de enfriamiento de alta eficiencia. Los diseños deben operar eficientemente a nivel de sistema y emplear componentes eficientes. Esto exige una estrategia de control eficaz que optimice la operación eficiente sin comprometer la confiabilidad.
El informe subraya que los centros de datos deben considerar la posibilidad de reutilizar el calor residual que generan. Los equipos informáticos con refrigeración líquida directa probablemente proporcionen una mejora adicional en la temperatura de retorno del refrigerante.
En cuanto a la selección e implementación de nuevos equipos de energía, una cuidadosa elección puede generar ahorros sustanciales a lo largo de la vida útil de las instalaciones. Además, el documento indica que los centros de datos pueden utilizar una cantidad significativa de agua para enfriar y controlar la humedad; el uso de fuentes de agua de baja intensidad energética puede reducir el consumo energético efectivo del centro de datos.
Asimismo, el informe destaca el desarrollo y la implementación de una estrategia de gestión de monitoreo y generación de informes de energía como algo fundamental para operar un centro de datos eficiente. Finalmente, subraya la utilización de equipos informáticos como factor clave para optimizar la eficiencia energética del centro de datos.