El Hospital Universitario de La Palma, adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, ha renovado su sistema de climatización. Con una inversión de 278.789 euros se han instalado dos nuevas enfriadoras que optimizan la eficiencia directa del sistema en un 32%, disminuyendo así el impacto ambiental y la huella de carbono generada por este tipo de equipos.
Esta iniciativa es una de los primeras impulsadas con los fondos europeos Next Generation, recibidos de una partida de 5,2 millones de euros provenientes de una orden conjunta repartida por la Consejería de Transición Ecológica y Energía, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del ejecutivo regional, clasificada en el Programa 1 de Autosuficiencia Energética de las Administraciones Públicas y Fomento del Autoconsumo Social.
Además, responde a los objetivos del Programa Operativo de la Estrategia de Energía Sostenible en las Islas Canarias y forma parte de la Estrategia Salud Zer0 Emisiones Netas 2030, cuyo propósito es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en los servicios sanitarios del archipiélago y contribuir a mitigar los efectos del cambio climático.
Nueva climatización en el Hospital Universitario de La Palma
La semana pasada se pusieron en funcionamiento estos nuevos equipos, optimizando así la generación frigorífica de las instalaciones hospitalarias. La sustitución de las dos unidades, cuyo grado de obsolescencia provocaba pérdidas de eficiencia, responde a la necesidad de garantizar la actividad asistencial en el Hospital Universitario de La Palma. Además, con esta actualización, el centro cumple con el Tratado de Kioto (R22), promoviendo la reducción de la huella ecológica mediante la eliminación de equipos de alto consumo eléctrico y con emisiones de gases refrigerantes contaminantes.
El nuevo sistema instalado permite un ahorro tanto de energía frigorífica como calorífica a través de dos circuitos hidráulicos independientes. Además, la producción de agua caliente sanitaria (ACS) se realiza mediante una caldera pirotubular estándar que utiliza gasoil tipo A como fuente de energía. El circuito hidráulico de aprovechamiento térmico se conectará a los intercambiadores de calor ya instalados, lo que permitirá precalentar el agua caliente sanitaria a aproximadamente 45ºC, contribuyendo así a una reducción adicional en el consumo de combustible.
Con el despliegue de estas acciones, la Gerencia de los Servicios Sanitarios del Área de Salud de La Palma reafirma su compromiso de contribuir a la eficiencia energética a través de la conservación de la energía, reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero, y contribuyendo a la sostenibilidad y la descarbonización del sector sanitario.