El Ayuntamiento de Valladolid ha sacado a licitación la ampliación de la ruta ‘Ríos de Luz’, que tiene como objetivo la iluminación ornamental de dos edificios relevantes de Valladolid sustituyendo el actual sistema de iluminación exterior por elementos LED de mucha mayor eficiencia energética. Se trata de El Mercado de Val y Casa Mantilla.
El contrato contempla dos lotes: el alumbrado ornamental del Mercado del Val y su entorno y el alumbrado ornamental de la Casa Mantilla con un presupuesto total estimado de 274.978,87 euros. Los interesados pueden presentar ofertas hasta el 17 de febrero a las 23:59 horas.
Incorporación de El Mercado del Val y Casa Mantilla
La ruta ‘Ríos de Luz’ es una iniciativa que consiste en aunar el ahorro energético con la riqueza arquitectónica de la ciudad, generando una ruta turística nocturna singular que combina belleza y sostenibilidad. Ahora, Valladolid ha ampliado esta ruta incorporando El Mercado del Val y la Casa Mantilla, objeto de licitación para renovar su sistema de iluminación por LED.
La actuación correspondiente al Lote 1 incluye la renovación de la iluminación en el Mercado del Val y su entorno comprende la instalación de proyectores y luminarias de tecnología LED, tanto en el interior como en el exterior del mercado. En el exterior para la iluminación del entorno haciendo efectos que emulen a gotas de agua de forma acorde al significado de la ruta ‘Ríos de Luz’ y el paso del río por la ciudad, y en el interior, se sustituirán los proyectores existentes viejos y obsoletos que se encuentran en la zona superior de los puestos.
La actuación correspondiente al Lote 2 abarca la renovación de la iluminación de la Casa Mantilla y comprende la instalación de luminarias nuevas de tecnología LED para la iluminación de balcones y ventanas, así como distintos elementos arquitectónicos del edificio, tanto en la calle Miguel Íscar como en la acera de Recoletos, de uno de los edificios civiles de mayor valor arquitectónico de la ciudad.
La renovación permitirá en ambas instalaciones incrementar la eficiencia energética, reducir la contaminación lumínica y su impacto medioambiental y reducir notablemente el importante gasto corriente que representa su explotación y mantenimiento, tanto en cuanto a consumo energético como a gastos de reposición de las lámparas. El ahorro estimado en el consumo energético es de un 40%, tanto del gasto como de la emisión de CO2 a la atmósfera.