El Ayuntamiento de Bilbao ha comenzado esta semana las obras de construcción del nuevo Centro Municipal de Distrito para el barrio de Zorrotza. El consumo energético del edificio se satisfará en gran medida mediante el uso de energía procedente de fuentes renovables. Las actuaciones que se llevarán a cabo harán que el edificio disponga de una calificación energética A.
A este nuevo y moderno equipamiento se destinará una inversión de 8.588.767,13 euros (IVA incluido), que dará servicio al barrio y contará con múltiples dependencias vinculadas a diferentes áreas municipales, tales como Acción Social, Cultura y/o Juventud.
El edificio contará con una superficie total construida de 4.365 metros cuadrados y se organizará en siete plantas -una baja y seis superiores- que albergarán diferentes servicios desde biblioteca, salas de gimnasia o espacios para niñas, niños y jóvenes hasta aulas de formación y Equipos de Intervención Socio-Educativa vinculados al Área de Acción Social.
Nuevo Centro Municipal de Distrito sostenible
El nuevo Centro Municipal de Distrito (CMD) sustituirá al actual, ubicado en el Polideportivo Municipal, en el número 1 de la calle Clara Campoamor, que será cerrado cuando concluyan las obras del nuevo, dentro aproximadamente de 21 meses. La nueva referencia municipal se ubicará en el número 21 de Zorrozgoitibidea y estructuralmente se resolverá a través de dos volúmenes diferenciados y separados por un atrio acristalado.
El nuevo edificio será accesible, tanto en sus accesos como en sus respectivas dependencias, y estará aislado acústicamente. El consumo energético del edificio se satisfará, en gran medida, mediante el uso de energía procedente de fuentes renovables. En este sentido, se colocarán un total de 50 paneles fotovoltaicos en la cubierta para generar agua caliente en vestuarios y para asumir parte del consumo eléctrico que tenga el edificio.
El edificio dispondrá también de una envolvente térmica con unas características que harán que se limiten las necesidades de energía primaria. Así, las fachadas al exterior -incluyendo cubierta- tendrán aislamientos térmicos y sistemas de control solar para que sea necesaria una menor demanda de calor en invierno y una menor demanda de refrigeración en verano.
Con todo ello, el nuevo equipamiento dispondrá de una calificación energética A tanto en consumo de energía primaria no renovable como en emisiones de dióxido de carbono.