Según los datos recogidos por la Oficina Europea de Estadística (Eurostat) de la Comisión Europea de las Estadísticas de la UE sobre la renta y condiciones de vida (EU-SILC), en 2023 el 25,5% de la población de la UE de 16 años o más vivía en una vivienda en la que se había mejorado la eficiencia energética en los últimos cinco años. Además, el 17,8% de las personas en riesgo de pobreza o exclusión social informaron vivir en una vivienda con eficiencia energética mejorada, en comparación con el 27,5% de las que no estaban en riesgo.
A nivel nacional, entre las personas en riesgo de pobreza o exclusión social, Estonia (47,8%), los Países Bajos (45,1%) y Lituania (32,5%) informaron de las tasas más altas de mejoras en la eficiencia energética de las viviendas en las que viven, mientras que Chipre (5,0%), Malta (6,7%) e Italia (6,9%) tuvieron las más bajas.
Mejoras en la eficiencia energética en los hogares
El porcentaje de personas (de 16 años o más) que viven en viviendas en las que se ha mejorado la eficiencia energética en los últimos cinco años muestra en qué medida se han realizado reformas en las propiedades residenciales para mejorar el rendimiento energético. En 2023, los datos de Eurostat arrojan que el 25,5% de la población de la UE declaró vivir en una vivienda en la que se había mejorado la eficiencia energética en los últimos cinco años. La mayor proporción de mejoras se registró en los Países Bajos (58,7%), seguido de Estonia (46,7%) y Letonia (36,7%). Malta (8,4%) tuvo la tasa más baja, seguida de Grecia (11,9%), Chipre y España (ambos 14,6%) e Italia (14,7%).
En 2023, el 17,8% de las personas en riesgo de pobreza o exclusión social en la UE informaron que la eficiencia energética de sus viviendas había mejorado en los últimos cinco años, en comparación con el 27,5% de quienes no estaban en riesgo. Estonia registró la mayor proporción de mejoras entre quienes se encontraban en riesgo de pobreza o exclusión social (47,8%), seguida de los Países Bajos (45,1%), Lituania (32,5%) y Letonia (32,3%). En cambio, Chipre (5,0%), Malta (6,7%) e Italia (6,9%) presentaron las tasas más bajas. Entre quienes no se encontraban en riesgo de pobreza o exclusión social, los Países Bajos presentaron la tasa más alta (61,6%), mientras que Malta (8,8%) y Grecia (13,3%) presentaron la más baja.
Los datos señalan también que en 2023 las mejoras en la eficiencia energética se registraron con mayor frecuencia en las zonas rurales de toda la UE, con un promedio del 29,4%, en comparación con el 25,4% en las ciudades y suburbios y el 22,9% en las ciudades. Las ciudades que mostraron las mayores tasas de mejoras en la eficiencia energética fueron Eslovaquia (41,5%), Bulgaria (32,4%) y Portugal (30,7%), Italia y España (ambos 15,5%).
Porcentaje de viviendas no confortables durante el invierno
En 2023, el 17,9% de la población de la UE declaró vivir en una vivienda que no era confortablemente cálida durante el invierno, según Eurostat. El porcentaje más alto se registró en Portugal, donde el 38% de la población se enfrentó a este problema, seguido de Irlanda (34,3%), Grecia (28,5%), Francia (28,1%) y España (27,3%). En el otro extremo de la escala, Austria tuvo el menor porcentaje de población que informó falta de calor durante el invierno (3,7%), seguida de Estonia (4,3%), Eslovenia (4,7%), los Países Bajos (4,8%) y Bélgica (5,8%).
El 31,2% de las personas en riesgo de pobreza o exclusión social en la UE en 2023 declararon vivir en una vivienda que no era confortablemente cálida durante el invierno, en comparación con el 14,4% de las que no estaban en riesgo.
Las tasas más altas entre las personas en riesgo se observaron en Portugal (51,6%), Grecia (49,9%), Irlanda (44,5%), España (43,0%) y Francia (41,8%). En cambio, las tasas más bajas se registraron en los países del norte y centro de Europa, siendo Estonia (7,5%), Austria (9,3%) y Polonia (11,2%) los que registraron las tasas más bajas.
En 2023, el 19,1% de los habitantes de la UE que vivían en ciudades declararon que su vivienda no estaba confortablemente cálida durante el invierno, en comparación con el 17,6% en pueblos y suburbios y el 16,3% en zonas rurales, según los datos recogidos por Eurostat.