El proyecto Inasolar, impulsado desde la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), persigue replicar a menor escala la infraestructura necesaria para que un municipio alcance el autoabastecimiento energético exclusivamente con fuentes renovables sin conexión a la red, y desarrollar el software necesario que garantice una gestión eficaz de los recursos empleados. Este proyecto aspira a hacerse realidad en el municipio valenciano de Aras de los Olmos, así como replicarse en otras localidades.
Este proyecto surgió a raíz de la voluntad de Aras de los Olmos de alcanzar el autoabastecimiento energético y tratar de convertirse, de este modo, en la primera localidad de la península ibérica en desconectarse de la red eléctrica, siguiendo los pasos de la isla canaria de El Hierro. Las conclusiones que se extraigan del estudio se podrán replicar en otras localidades que aspiren a seguir el camino emprendido por la localidad valenciana.
La investigación, pionera en España y financiada con fondos Next Generation de la Unión Europea, está impulsada por el grupo GEDER de personal investigador perteneciente al Instituto Universitario de Investigación de Ingeniería Energética de la UPV.
Autoabastecimiento energético en Aras de los Olmos
La UPV aporta el conocimiento necesario para llevar a cabo el estudio y ejerce de centro de pruebas. El edificio de los departamentos de Ingeniería Eléctrica y Mecánica y de Materiales de la ETS de Industriales (5E) del campus de Vera alberga desde abril de 2024 la infraestructura y el equipamiento necesarios para llevar a cabo este estudio. En este sentido, en diferentes dependencias de este edificio se han instalado pequeñas plantas que obtienen electricidad procedente de las energías fotovoltaica, eólica e hidráulica, y un grupo electrógeno que replica una planta de biogás.
La instalación en su conjunto reproduce a una escala más reducida las necesidades energéticas que precisaría una localidad como Aras de los Olmos para ser autosuficiente, a partir de estas fuentes renovables, según los investigadores del proyecto Inasolar.
El proyecto también incluye el desarrollo de un potente programa informático que permite gestionar de manera regular la obtención y suministro constante de energía, según las diferentes necesidades y condiciones. Regular el momento cuando debe entrar en funcionamiento una u otra fuente de energía es importante. Esta fase depende de un potente software que supone uno de los hitos del proyecto. Según los investigadores del proyecto, la energía solar o eólica debe usarse cuando se genera, pero la procedente de las plantas de biogás e hidráulica son más gestionables, con lo que se puede decidir el momento más oportuno para que entren en funcionamiento.