El Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, a través del Instituto Catalán de Energía (Icaen) ha ampliado la línea de ayudas destinada a la rehabilitación energética de edificios en municipios de menos de 5.000 habitantes en 15 millones de euros. El objetivo es avanzar en la transición energética mediante la optimización del consumo energético en la edificación. También se ha prolongado el plazo para presentar solicitudes hasta el 31 de julio, que concluía en diciembre de 2023.
Este programa contaba con un presupuesto inicial en 2022 de 5,5 millones de euros. Con esta tercera ampliación, la dotación total de la línea ascenderá a 45 millones de euros. Por ahora, el Icaen ha recibido 637 solicitudes por un importe de 37,8 millones de euros. La línea está dotada con recursos de los fondos europeos Next Generation, y gracias a esta ampliación en el presupuesto se podrán cubrir todas las solicitudes que se habían recibido hasta el momento y se podrán atender nuevas.
Esta línea de ayudas para la rehabilitación energética de edificios se alinea con el proceso de transición hacia un nuevo modelo energético más limpio, sostenible, justo y democrático que ha iniciado Cataluña. El objetivo es alcanzar una sociedad y una economía descarbonizadas en 2050, con un modelo energético basado en la eficiencia energética y las energías renovables, y donde los ciudadanos puedan generar y gestionar su propia energía y participar en la toma de decisiones.
Eficiencia energética y energías renovables
La línea subvenciona actuaciones relacionadas tanto con la mejora energética de la envolvente de los edificios (fachadas, cubierta o suelo) como con la mejora de la eficiencia energética y el uso de energías renovables en sus instalaciones térmicas, como son la calefacción, climatización, refrigeración, ventilación y agua caliente sanitaria.
Está dirigida a viviendas unifamiliares, edificios de tipología residencial colectiva de vivienda o edificios para cualquier otro uso que estén ubicados en municipios de hasta 5.000 habitantes y los municipios no urbanos de hasta 20.000 habitantes en los que todas las entidades singulares de población sean de hasta 5.000 habitantes.
Para acceder a este programa hay diferentes requisitos como que el edificio sea anterior a 2007, que la actuación suponga la mejora de una letra en la certificación energética del edificio (en la calificación de emisiones de CO2), y que genere un ahorro mínimo del 30% del consumo de energía primaria no renovable. Cabe destacar que la convocatoria excluye la obra nueva, las ampliaciones (tanto en superficie como en volumen) y cambios de uso.
Respecto a las solicitudes las pueden realizar todas las personas físicas o jurídicas que sean propietarias de edificios existentes; las comunidades de propietarios de edificios de uso residencial; las empresas explotadoras, arrendatarias o concesionarias de edificios; las empresas de servicios energéticos; los ayuntamientos, diputaciones u otras corporaciones equivalentes; y las comunidades de energías renovables y las comunidades ciudadanas de energía.