La empresa Stechome especializada en el diseño, desarrollo, despliegue y dinamización de proyectos relacionados con la renovación y transformación urbana, cuenta con experiencia para el desarrollo de cualquier requerimiento vinculado a la monitorización de consumos, costes y confort. Por ello, se le ha adjudicado la monitorización de 224 viviendas en el barrio vitoriano de Zaramaga. El proyecto incluye la creación y generación de una red de comunicación inalámbrica Lora en la que se implantarán dispositivos vinculados al confort y el consumo energético, lo que permitirá conocer el impacto real de las acciones de rehabilitación energética y descarbonización en el barrio de Zaramaga.
El importe total de las ayudas concedidas para este proyecto de regeneración del barrio de Zaramaga asciende a 14.648.570,68 euros, de los cuales se van a beneficiar los 24 inmuebles que se han sumado a la futura rehabilitación energética del barrio.
El objetivo es lograr la máxima eficiencia energética en las viviendas y la reducción en la factura energética de los vecinos. La Sociedad Urbanística Municipal ENSANCHE 21 ZABALGUNEA, en calidad de entidad colaboradora del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, es quien lleva a cabo el Plan Interinstitucional de Inversiones Estratégicas PIIE-24, Proyecto Zaramaga.
Consumo y comportamiento energético a través de la plataforma de Stechome
El equipo de Stechome desarrollará para este proyecto una plataforma específica que integrará en tiempo real los datos de consumo y comportamiento energético, vinculándolos con los perfiles energéticos obtenidos, generando así una imagen real previa y posterior al proyecto y proceso de rehabilitación que próximamente se llevará a cabo.
Gracias a la tecnología PowerBi, que mostrará indicadores de seguimiento del confort, se podrán cruzar datos de perfiles energéticos, monitorización y situaciones arquitectónicas para que, tanto técnicos externos como instituciones municipales, puedan desarrollar futuras actuaciones de medición y monitorización del impacto de la energía, verificando de primera mano el impacto de las inversiones y de las ayudas públicas.
Los dispositivos medirán el consumo eléctrico individualizado, el consumo de gas natural y los valores de temperatura, humedad relativa y niveles de CO2 interior. Con estos datos se podrá conocer el comportamiento energético de las familias, ubicaciones, orientaciones y viviendas, creando un perfil energético basado en el grado de ocupación, edad, condiciones de confort y equipamientos.
Las familias participantes en el proyecto y la dirección técnica del mismo tendrán acceso individualizado y 100% seguro a la información generada dentro del proyecto, debido a que es un sistema de encriptación de datos y de desfragmentación de la información, y se evita así la vinculación directa entre los datos personales y de comportamiento o consumo.