El Consejo Europeo ha adoptado dos reglamentos para reducir de manera progresiva las emisiones de gases fluorados y otras sustancias que causan el calentamiento global y agotan la capa de ozono. Según las nuevas normas, el consumo de hidrofluorocarbonos (HFC) se eliminará por completo de aquí a 2050. Por otro lado, la producción de HFC se reducirá gradualmente al mínimo (15%) a partir de 2036. Tanto la producción como el consumo se reducirán progresivamente sobre la base de un calendario estricto con una asignación de cuotas decreciente. También se establecen fechas específicas para la eliminación completa del uso de gases fluorados en aire acondicionado, bombas de calor y aparamenta. Los dos reglamentos deberán ser firmados por el Consejo Europeo y el Parlamento Europeo. Luego se publicarán en el Diario Oficial de la UE y entrarán en vigor 20 días después.
Aunque la legislación vigente de la UE ya ha limitado significativamente el uso de estos gases y sustancias, las nuevas normas reducirán aún más sus emisiones a la atmósfera y contribuirán a limitar el aumento de la temperatura global, en consonancia con el Acuerdo de París.
Normas para reducir las emisiones de gases fluorados
Uno de los textos introduce la prohibición de comercializar productos y equipos que contengan HFC para varias categorías para las cuales es tecnológica y económicamente viable cambiar a alternativas a los gases fluorados, incluidos determinados refrigeradores, enfriadores, espumas y aerosoles domésticos. Además, establece fechas específicas para la eliminación total del uso de gases fluorados en aire acondicionado, bombas de calor y aparamentas. Así, establece la eliminación para 2032 de pequeñas bombas de calor monobloque y aire acondicionado (<12 kW).
El texto también incluye la eliminación en 2035 para aire acondicionado split y bombas de calor, con plazos más tempranos para ciertos tipos de sistemas split con mayor potencial de calentamiento global. En 2030 establece la eliminación para aparamentas de media tensión (hasta 52 kV inclusive) que dependen de gases fluorados, y la eliminación de celdas de alta tensión (>52 kV) para 2032.
La Comisión Europea deberá revisar, no más tarde del 1 de enero de 2030, las repercusiones y efectos de este reglamento, incluida una evaluación con alternativas rentables, viables y suficientemente disponibles para sustituir a los gases fluorados.
Por otro lado, de aquí a 2040, deberá también evaluar la viabilidad de la fecha de eliminación progresiva de 2050 para el consumo de HFC y la necesidad de HFC en los sectores en los que todavía se utilizan, teniendo en cuenta los avances tecnológicos y la disponibilidad de alternativas a los HFC para las aplicaciones en cuestión.
Normas para reducir las sustancias que agotan la capa de ozono
El otro reglamento prohíbe las sustancias que agotan la capa de ozono (SAO) para casi todos los usos, con exenciones estrictamente limitadas. El texto incluye una exención para el uso de SAO como materia prima para producir otras sustancias. La Comisión Europea tendrá la tarea de actualizar periódicamente una lista de SAO cuyo uso como materia prima está prohibido.
El texto permite el uso de SAO en condiciones estrictas como agentes de proceso, en laboratorios y para protección contra incendios en aplicaciones especiales como equipos militares y aviones.
El reglamento amplía el requisito de recuperar SAO para su destrucción, reciclaje o recuperación a sectores tales como materiales de construcción (espumas aislantes), equipos de refrigeración, aire acondicionado y bombas de calor, equipos que contienen solventes o sistemas de protección contra incendios y extintores y otros equipos, si es técnica y económicamente viable.