Según el Balance 2022 elaborado en el marco de la Estrategia catalana para promover el aprovechamiento energético de la biomasa forestal y agrícola del Instituto Catalán de Energía (Icaen), el consumo de biomasa forestal para usos térmicos creció en Cataluña un 9,5% en 2022. En total, el consumo de biomasa forestal ascendió a 546.700 toneladas anuales, y la superficie forestal gestionada aumentó un 10%, hasta las 22.778 hectáreas.
La Generalitat de Cataluña ha renovado la Estrategia para el aprovechamiento de la biomasa forestal y agrícola en Cataluña para el período 2021-2027. Esta línea de acción empezó a aplicarse en 2014, y establece nuevos objetivos con la voluntad de seguir avanzando en los usos energéticos de la biomasa y profundizar en los beneficios que implica. Desde su puesta en marcha en 2014, se ha incrementado un 81,6% el consumo de este recurso renovable de proximidad.
Consumo de biomasa en Cataluña
El resultado del Balance 2022 permite avanzar en el cumplimiento de los objetivos de la Estrategia, que pretende alcanzar las 730.000 toneladas de biomasa consumida para usos térmicos y las 30.400 hectáreas gestionadas en 2027, e instalar equipos y calderas hasta alcanzar los 844 MW de potencia.
El Instituto Catalán de Energía (Icaen) cuenta con dos líneas de ayudas que continúan vigentes actualmente para incentivar las energías renovables para usos térmicos, principal función de la biomasa. En el ámbito de la actividad productiva, se han recibido 118 solicitudes de proyectos a tal fin, mientras que en el ámbito residencial se están tramitando 1.252 peticiones. La línea de ayudas en el ámbito de la actividad productiva aún dispone de presupuesto, por lo que todavía se pueden seguir presentando solicitudes.