El proyecto europeo Neutralpath pretende demostrar que los distritos de energía limpia y positiva (PCED) diseñados e implementados bajo enfoques colaborativos y centrados en la ciudadanía pueden ser soluciones rentables y viables para contribuir significativamente a la transformación de las ciudades hacia la neutralidad climática, permitiendo acelerar el proceso para alcanzar incluso la reducción de emisiones de alcance 2 en 2030. A lo largo del proyecto, Dresden (Alemania) y Zaragoza (España), con una sólida experiencia en proyectos de transformación urbana y plenamente comprometidas con la neutralidad climática en 2030, demostrarán dos PCED desde las etapas de diseño hasta la implementación y evaluación actuando como ciudades faro.
El proyecto Neutralpath está financiado en el marco de la Misión Europea de Ciudades Inteligentes y Neutralidad Climática, comenzó en enero de este año 2023 y está previsto que finalice en 2027. Está coordinado por la Fundación Cartif y el consorcio lo integran 30 participantes, incluyendo cinco entidades afiliadas de siete países diferentes (España, Dinamarca, Bélgica, Italia, Francia, Finlandia y Turquía).
Entre los participantes se encuentra la Fundación Circe, el Ayuntamiento de Zaragoza, la Sociedad Municipal Zaragoza Vivienda, Veolia, Giroa Sociedad Anónimo, Energía Solar Onyx S.L., Itesal S.L., Arino Duglass S.A, Sociedad Aragonesa de Rehabilitación Energética S.L. o Fundación Tecnalia, entre otros.
Objetivos del proyecto Neutralpath
El proyecto Neutralpath tiene como objetivo apoyar a las ciudades en su transición hacia la neutralidad climática mediante el diseño de un plan colaborativo para un futuro más sostenible para todos. Para ello, en primer lugar, tienen como propósito diseñar dos PCED en las ciudades faro para demostrar que son soluciones válidas para alcanzar la neutralidad climática; establecer cinco CN-Labs en el faro y ciudades vecinas que actuarán como centros de innovación para coordinar y facilitar los procesos de cocreación; y establecer estrategias de gobernanza innovadoras para permitir la transformación de las ciudades hacia la neutralidad climática.
El proyecto también tiene como objetivo definir métricas para la evaluación del PCED, el balance anual de energía y CO2; promover la ampliación y la replicación a través de PCED; y, por último, promover redes de ciudades para aprovechar el conocimiento, la tecnología y la financiación existentes y, a su vez, proporcionar una contribución objetiva a los objetivos climáticos.
Durante el desarrollo del proyecto, pretenden conseguir resultados positivos al involucrar a varias partes interesadas como son los residentes, que participarán en actividades de codiseño; los proveedores de la industria y la tecnología, que integrarán su experiencia en el desarrollo de nuevos sistemas, herramientas y servicios; la comunidad científica, que permitirá una mayor explotación en futuras iniciativas I-i y lanzará nuevas líneas de investigación; las autoridades públicas y responsables de la formulación de políticas, que contribuirán al desarrollo e implementación de políticas; y, por último, los inversores y actores financieros, que demostrarán los beneficios y el retorno de la inversión en los PCED.
Para conseguir los objetivos del proyecto se deberá contribuir al diseño de los Contratos Climáticos de la Misión Europea de Ciudades mediante el aprendizaje desarrollado en el marco del proyecto, se deberá contribuir al diseño de los mecanismos de evaluación de los distritos de energía positiva con foco en el balance energético y de emisiones, y mejorar las funcionalidades de herramientas existentes de soporte al diseño de distritos de energía positiva.
Con la consecución del proyecto se espera conseguir guías y recomendaciones para la implementación de los contratos climáticos para alcanzar la neutralidad climática a través del despliegue de distritos de energía limpia y positiva, y también se espera el desarrollo y mejora de funcionalidades de herramientas existentes de soporte al diseño de distritos de energía positiva.
Distritos de energía limpia y positiva en dos ciudades faro
Los distritos de energía limpia y positiva (PCED) son elementos cruciales del proceso de transformación urbana hacia la neutralidad climática y deben estar en el centro de los planes de descarbonización de las ciudades. En el papel de ciudades faro, Dresden y Zaragoza demostrarán dos PCED a través de las fases de diseño, implementación y evaluación. Con este fin, ambos establecerán CN-Labs para diseñar soluciones participativas y centradas en las personas y promover una difusión y replicabilidad más rápidas a nivel de la UE.
Dresden se centrará en medidas para descarbonizar la calefacción urbana con energía geotérmica y calor residual y en el desarrollo de una rama de baja emisión de la calefacción urbana. El PCED se desarrollará en dos áreas que involucran 17 edificios.
Zaragoza se centrará en la reducción de la demanda de energía térmica mediante la renovación de fachadas, la sustitución de ventanas y el uso de materiales aislantes innovadores en dos edificios residenciales y cuatro públicos del distrito Actur-Rey Fernando.
Además, a través de sus respectivos CN-Labs, tres ciudades hermanas (Estambul, Gante y Vaanta) se convertirán en participantes directos en los procesos y posteriormente en actores en el diseño de su propio PCED.
Ciudad de Zaragoza
Zaragoza ya se ha convertido en la primera gran ciudad de España en reciclar más del 50% de sus residuos (un 35% de media) y ha sido seleccionada dentro de la iniciativa NetZeroCities para tomar medidas climáticas de aquí a 2030. La ciudad implementará su PCDE en el distrito Actur-Rey Fernando, incluyendo dos edificios residenciales y cuatro públicos. Las iniciativas pioneras del distrito se centrarán en la renovación de estos edificios mediante un mejor aislamiento, la integración de fuentes de energía renovables (RES) mediante la instalación fotovoltaica y el anillo de calefacción urbana LowEx mediante conexión hidrotérmica para compartir energía entre edificios.
Las intervenciones incluyen en primer lugar la renovación de la envolvente para reducir la demanda energética de los edificios; en segundo lugar, la dotación de calefacción, ventilación y aire acondicionado de alta eficiencia y agua caliente sanitaria; en tercer lugar, fuentes integradas de energía renovable; en cuarto lugar, gestión de red y optimización del control energético; y, en quinto lugar, movilidad eléctrica.
En cuanto a la primera actuación de renovación de la envolvente, se va a llevar a cabo la rehabilitación de fachadas para mejorar el aislamiento de los edificios mediante granulado de espuma de poliuretano reciclado. También se van a reemplazar las ventanas por triple acristalamiento para lograr un revestimiento de alto rendimiento con mayor transmisión visible y mayor eficiencia energética. Y de igual modo, se va a mejorar la carpintería exterior para evitar pérdidas energéticas en las ventanas minimizando la exposición frontal de las prestaciones del sistema.
Respecto a la segunda actuación, se va a dotar a los edificios de bombas de CO2 de alta temperatura con una potencia instalada de 30 kW para producir el 100% de agua caliente sanitaria (ACS) de las viviendas en edificios residenciales. Asimismo, se van a instalar bombas de alta temperatura para calefacción mediante energía hidrotérmica.
La tercera intervención incluye una fachada fotovoltaica (PV) con ventilación activa para un rendimiento y aprovechamiento de la energía eléctrica óptimos. Además del desarrollo de los pozos necesarios para proporcionar la energía hidrotérmica que necesita el distrito LowEx (pozos de captación y vertido). Y también la instalación de paneles fotovoltaicos para abastecer la demanda eléctrica y exportar excedentes energéticos.
La cuarta intervención incluye una herramienta de evaluación energética y ambiental para la replicación del PCED con el fin de mejorar la información abierta, la toma de decisiones, el seguimiento y la gestión de los indicadores urbanos.
Y por último, respecto a la quinta intervención se van a desarrollar cargadores V2G de 12,5 kW para vehículos eléctricos o híbridos que permitan recargar electricidad al menor precio posible e inyectarla a la red cuando sea más cara.
Las ciudades faro desempeñarán un papel fundamental diseñando soluciones participativas y centradas en las personas, promoviendo una difusión y replicabilidad más rápidas a nivel de la UE, todo ello para conseguir los objetivos climáticos reduciendo las emisiones de carbono para 2030.