La Oficina de Transición Energética, dirigida al impulso de una nueva cultura energética para Gipuzkoa, ha recibido 559.950,76 euros de los fondos Next Generation dentro de su Plan de Recuperación y Resiliencia. Esta oficina se ubicará en el nuevo edificio de Naturklima y este año comenzarán los trabajos para que esté diseñada y en funcionamiento a finales de 2023 o principios de 2024.
Gracias a este proyecto de la Dirección de Transición Ecológica de la Diputación Foral de Gipuzkoa, se continuarán promoviendo las Comunidades Energéticas Ciudadanas que en estos momentos ya se encuentran en fase de puesta en marcha y funcionamiento en más de la mitad del territorio guipuzcoano.
Las comunidades energéticas tienen el objetivo de fomentar la cultura energética de Gipuzkoa y empoderar a la ciudadanía, acelerando así la transición hacia un nuevo modelo energético de gestión de la demanda y generación distribuida de energía para autoconsumo en base a fuentes renovables y otras tecnologías de apoyo.
Oficina de Transición Energética
El Departamento de Sostenibilidad de la Diputación Foral de Gipuzkoa lleva impulsando desde hace muchos años un nuevo modelo energético sostenible. La Dirección de Transición Ecológica ha intensificado su apuesta por un modelo energético basado en la energía entendida como un bien básico y una jerarquía de acción que conduzca a Gipuzkoa hacia un escenario con una gestión energética eficiente y sostenible con la implementación de las energías renovables.
La Oficina de Transición Energética en Gipuzkoa contempla varias líneas de actuación que se basan en el fomento, impulso y creación de las comunidades energéticas entre los ciudadanos, pymes y entidades locales; en el mantenimiento y mejora del servicio territorial de información y asesoría energética para hogares y pequeño comercio; en el desarrollo de contenidos y herramientas para la asesoría técnica, administrativa, jurídica, social y económica y en la información y concienciación en materia energética; en la coordinación con las oficinas de energía comarcales y resto de servicios en materia energética y en el apoyo de todo tipo de proyectos sociales relacionados con la transformación energética, como los hogares en situación de pobreza energética.
Además, se dispondrá de una sala de control de las comunidades energéticas donde, además de recogerse todos los datos de funcionamiento de las instalaciones, se llevará a cabo su monitorización en tiempo real para garantizar a toda la ciudadanía un servicio público seguro y transparente. En esta sala, se monitorizará la productividad de las plantas fotovoltaicas y su contribución al ahorro energético y la reducción de emisiones de CO2. A su vez, recibirá alertas de potenciales problemas técnicos para el buen funcionamiento de estas.