La vivienda unifamiliar de 260 m2 Casa Sophia, ubicada en Guadalix de la Sierra (Madrid), es un caso de éxito de Siber en materia de ventilación. En concreto cuenta con la tecnología sistema VMC de alta eficiencia (hasta 95%) y el sistema Siber AXR Radón. De hecho, la vivienda monitoriza factores como la presencia de formaldehidos, COVs, gas radón, O3-ozono troposférico, CO2, partículas de polvo en suspensión, temperatura, humedad y consumo.
La construcción se basa en los tres aspectos que definen la arquitectura bioclimática. En primer lugar, el ahorro energético, gracias a la aplicación del estándar Passivhaus, con el que se ha certificado el edificio; luego el respeto al medio ambiente a partir de materiales e instalaciones sostenibles; y, por último, en la construcción sana, utilizando madera de bosques de proximidad como material principal.
El objetivo de este proyecto es disponer de una construcción de calidad, sana y ecológica con un gasto energético mínimo. Para ello se han unido el diseño, la investigación e innovación de todos los materiales que lo forman.
Sistemas de ventilación con recuperación de calor
La casa está distribuida en planta baja, una mini casa biopasiva integrada y una planta superior, además de un amplio exterior. También cuenta con una clasificación energética A (en proceso de certificación Passivhaus Premium).
Se han montado dos sistemas distintos de ventilación con recuperador de calor: en la vivienda principal se ha colocado una máquina de ventilación de sistema centralizado, de la firma Siber de 400 m3/h y certificado Passivhaus. La otra es también de Siber, pero se trata de un sistema descentralizado e instalado en la mini casa de 50 m2.
De esta manera se puede comprobar la calidad del aire que se consigue en viviendas pequeñas con estos sistemas descentralizados, ya que esta es la instalación que se ha montado de serie en la minicasa biopasiva.
A estos equipos de ventilación se les acopla un humidificador para aquellos momentos en los que la humedad relativa exterior sea muy baja. Madrid es una zona muy seca y en verano, por ejemplo, se llega a valores muy bajos (del 12%) que no son beneficiosos para la salud. Los valores aconsejados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el interior de una edificación son del 40-60%.
El radón es un gas radiactivo incoloro e inodoro que se produce por desintegración radiactiva natural del uranio presente en suelos y rocas. El radón emana fácilmente del suelo y pasa al aire, donde se desintegra y emite otras partículas radiactivas. Al respirar se inhalan esas partículas, que se depositan en las células que recubren las vías respiratorias, y puede provocar importantes daños en la salud. Casa Sophia cuenta con un sistema que permite identificar la presencia de este gas y actuar consecuentemente para mejorar la ventilación.
Sostenibilidad y eficiencia energética
Casa Sophia cuenta con los sistemas de ventilación de doble flujo de la empresa Siber. Es una vivienda realizada a base de madera, que es un modelo en construcción ecológica, al generar más energía de la que consume. Además, es un ejemplo de sostenibilidad y eficiencia energética.
La vivienda está diseñada para obtener los mejores resultados en eficiencia energética y respeto hacia el medio ambiente. Es el resultado de dos años de trabajo y está construida a partir de materiales naturales y reciclados. Se trata de una vivienda 100×100 BioPasiva que actúa a la vez como un laboratorio focalizado en la sostenibilidad y la salubridad de los materiales.
Como centro de investigación, Casa Sophia está orientada a obtener datos sobre la calidad del aire interior y su optimización. Además, también sirve de showroom de los sistemas y materiales utilizados, considerándose una de las construcciones más sostenibles de Europa.
Aerotermia y climatización
Casa Sophia cuenta con una aerotermia de última generación de 11 kW que destaca por ser la primera en el mercado que da un 6,5 de COP (eficiencia de la máquina) algo que hasta ahora solo se había alcanzado en la geotermia. Además, cuenta con una máquina altamente ecológica ya que los gases que se utilizan son de muy bajo impacto medioambiental.
En cuanto a la climatización, se han escogido dos sistemas diferentes que permitirán obtener los datos de consumo, temperatura y confort. Se trata del suelo radiante/refrescante que va solo en la planta baja de todo el edificio, y un exclusivo sistema de climatización a través de la ventilación.
Sellos de calidad y certificaciones
Esta vivienda unifamiliar ha obtenido varias certificaciones de calidad. El certificado Passivhaus Premium determina la eficiencia energética. Lo ha obtenido por tratarse de una vivienda positiva, es decir, genera más energía de la que consume y el excedente se vuelca a la red compensándolo para obtener un balance neto o en muchos meses del año positivo.
Además, Casa Sophia ha obtenido una segunda certificación que es el Sello Verde. Este determina la parte del respeto al medio ambiente. Lo otorga el GBCe y sirve para analizar los materiales e instalaciones para mejorarlas.
El tercer certificado es el de la huella ambiental y la compensación de la huella de carbono. A través de él se calcula y compensa la huella de carbono para convertir la vivienda en emisiones cero CO2 o balance neutro en emisiones.
Asimismo, hay que añadir el Sello Recicla y la certificación de Residuo Cero. De esta manera se certifica que en este proyecto se ha reciclado el 100% del residuo de la obra. Además, todo el movimiento de tierras se ha repartido entre dos vecinos del municipio que necesitaban tierra de relleno. Todo esto se ha reutilizado sin tener que llevarlo al vertedero, evitando, además, las emisiones a la atmósfera que expulsaría el camión en su traslado.
Instalación fotovoltaica
Una de las innovaciones de este proyecto es la instalación fotovoltaica en la cubierta de la mini casa con una instalación de 2 kW. Cuenta con 60 placas solares de 400 W de potencia con lo que se obtienen 26 kW en total. Además, hay dos cargadores de vehículos eléctricos.
Asimismo, tanto los controles de acceso, como los sistemas de seguridad, iluminación, climatización, ventilación, control de la depuradora de la piscina, y por supuesto los tradicionales sistemas de monitorización de CO2, temperatura, humedad, consumo total de la vivienda y generación fotovoltaica funcionan de manera domótica.
En definitiva, la tecnología de última generación empleada en el proyecto Casa Sophia convierte esta vivienda en un ejemplo de salubridad, eficiencia energética y sostenibilidad.