La Comisión Europea ha aprobado un paquete de inversión de más de 380 millones de euros para 168 nuevos proyectos del Programa LIFE, esto supone un aumento del 27% sobre el importe de la anterior edición. Esta financiación de la UE en el marco de LIFE movilizará una inversión total de más de 562 millones de euros en estos proyectos que buscan apoyar la biodiversidad, la restauración de la naturaleza y una economía circular mientras contribuyen a la transición de energía limpia en todo el continente.
Concretamente se dedicarán 67 proyectos a mejorar las condiciones regulatorias y de mercado en la UE para la transición hacia la energía limpia, en particular, promoviendo y desplegando soluciones de eficiencia energética y energías renovables a pequeña escala.
Para ello contarán con un presupuesto total de más de 100 millones de euros, de los cuales la UE aportará alrededor de 96 millones. Estos proyectos respaldan las políticas de eficiencia energética y energías renovables establecidas en el plan REPowerEU y el paquete Fit for 55 , así como los objetivos generales de la Unión de la Energía.
Reducir la factura energética e impulsar las comunidades energéticas
En la transición a la energía limpia, siete proyectos establecerán 16 nuevas ventanillas únicas que facilitarán la renovación energética para miles de propietarios de viviendas en cinco países de la UE. Tres proyectos ayudarán a los hogares a reducir sus facturas de energía a través de la renovación energética de distritos vulnerables y hojas de ruta de renovación a medida en el sur y el este de Europa.
Seis proyectos impulsarán a las comunidades energéticas a nivel local y regional para invertir en la transición energética. También participarán en proyectos de eficiencia energética y generación de energía renovable, incluida la calefacción y refrigeración comunitarias en toda Europa.
Cinco proyectos de energía limpia en España
Los proyectos de transición de energía limpia en España son cinco: Construye 2030, LIFE Beckon, Genera, Jalon, y Comanage. En Construye 2030 el equipo del proyecto acelerará la renovación rentable de los edificios existentes y promoverá el uso de tecnologías inteligentes en los edificios. Esto ayudará a alcanzar los objetivos políticos de eficiencia energética, economía circular y el uso de fuentes de energía renovables. El equipo del proyecto formará a los trabajadores en habilidades relacionadas con la digitalización; los edificios inteligentes; la calefacción y la refrigeración; y la evaluación del ciclo de vida del carbono.
El proyecto LIFE Beckom pretende fomentar la creación de comunidades energéticas en toda Europa mediante el desarrollo de mecanismos de apoyo para autoridades públicas, promotores y grupos de Acción Local. Este apoyo incluirá un libro de asistencia técnica que brinda orientación sobre el establecimiento de oficinas de asistencia técnica y un programa de desarrollo de capacidades para aumentar el conocimiento de las partes interesadas y ofrecer servicios integrados en una plataforma de ventanilla única.
Genera tiene como objetivo proporcionar nuevas herramientas de monitoreo de energía, adaptadas a las necesidades de las islas, para ayudar a la toma de decisiones e impulsar la transición energética sostenible. Otras medidas incluyen programas de creación de capacidad a gran escala y la participación de las sociedades locales.
Por su parte, el proyecto Jalon se basa en una estrecha colaboración con las partes interesadas locales para que las comunidades energéticas actúen como un instrumento de innovación social y resuelvan las necesidades locales, especialmente para las regiones rurales. Se demostrará a través de una comunidad energética regional a gran escala que reunirá a 87 pueblos rurales de España. El objetivo es movilizar 13 millones de euros para invertir en instalaciones de energía fotovoltaica.
Finalmente, el equipo del proyecto Comanage equiparará a las autoridades públicas con servicios, mecanismos de apoyo y herramientas para ayudar a gobernar y gestionar comunidades energéticas y otras formas de iniciativas energéticas dirigidas por ciudadanos. En última instancia, el objetivo es estimular nuevos proyectos de energía de propiedad comunitaria y garantizar que los proyectos existentes puedan crecer a medio y largo plazo.