El objetivo de la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom) es aumentar el consumo de biomasa con fines energéticos en España y que, de esta manera, las empresas asociadas y su volumen de negocio crezcan también. Javier Díaz, presidente de Avebiom, apuesta por la sustitución de los combustibles fósiles por biomasa y por las redes de calor con biomasa en el sector residencial, industrial y servicios. Además, hace un repaso de las ayudas existentes en el sector y propone otras adicionales.
ESEFICIENCIA: Con el encarecimiento de los precios energéticos, ¿cómo está afectando el contexto actual al sector de la biomasa? ¿Cómo contribuye la biomasa a la eficiencia energética? ¿Qué ventajas y beneficios ofrece este tipo de energía? ¿Qué papel puede jugar la biomasa tanto para uso térmico como eléctrico?
Javier Díaz: Evidentemente, el aumento de los precios de la energía eléctrica, de los combustibles para transporte y de las materias primas como el acero, los componentes electrónicos o la misma biomasa forestal está repercutiendo en la fabricación de equipos y en la producción de pellets y astillas en toda Europa y, por tanto, también en España. Además, se está viviendo una reducción muy significativa de las importaciones de pellet desde Rusia a Europa y vemos cómo aumenta la instalación de calderas, sobre todo en Austria, Alemania y Francia.
Este escenario parece indicar una subida de los precios de equipos y biocombustibles sólidos durante la próxima temporada, aunque la bioenergía seguirá siendo una alternativa competitiva en precios frente a los combustibles fósiles.
Y es que la mayor ventaja de la biomasa es la estabilidad del precio del kWh térmico en una horquilla que siempre resulta competitiva frente a todos los combustibles fósiles y a la electricidad en cualquier circunstancia. Avebiom elabora de manera trimestral un índice de precios de biomasa (IPB) para uso doméstico desde 2012 para pellet, hueso de aceituna y astilla forestal, que se puede consultar en nuestra web.
Por otra parte, hay que señalar que España cuenta con más de 20 millones de toneladas anuales disponibles de biomasa agrícola y forestal, que podrían abastecer de forma sostenible una potencia superior a 2.500 MW eléctricos. Ubicadas en las zonas apropiadas y cerca de los recursos biomásicos, estas plantas sustituirían a dos centrales nucleares, el 35% de la potencia nuclear total instalada en nuestro país, o al 10% de la potencia total instalada en ciclos combinados alimentados con gas natural.
ESEFICIENCIA: Recientemente se ha presentado el proyecto para la construcción de una central de cogeneración con biomasa en Olmedo (Valladolid). ¿Cuál es el potencial de este proyecto? ¿Qué puede suponer para la valorización energética de biomasa en la agroindustria? También destacan las redes de calor con biomasa en municipios, etc., ¿qué proyectos relacionados con la biomasa destacarías en nuestro país actualmente?
Javier Díaz: Con sus 80 MW de potencia, el proyecto de cogeneración con biomasa que está desarrollando nuestro asociado ENSO para la cooperativa ACOR va a convertirse en un hito de la valorización energética de biomasa en la agroindustria; una punta de lanza para animar a otras empresas a abandonar los combustibles fósiles por una fuente de energía local, abundante y confiable y que permite una descarbonización plena de manera rentable.
En principio, la planta consumirá biomasa forestal de origen sostenible certificado bajo el esquema europeo SURE, pero está planteado también que, en el futuro, los socios de la cooperativa provean parte del biocombustible y valoricen las cenizas de la combustión como fertilizante en sus explotaciones.
Creo que la sustitución de los combustibles fósiles por biomasa en la industria es una muy acertada decisión por su gestionabilidad, el ahorro que proporciona y la facilidad de instalación en este ámbito.
En cuanto a las redes de calor urbanas, en Avebiom tenemos muy claro que se trata de una solución muy interesante para suministrar y asegurar energía limpia y rentable a los habitantes de ciudades de cualquier tamaño. Contar con una fuente de energía de origen nacional es un valor incontestable en la actualidad.
Según los datos recogidos por el Observatorio de la Biomasa, en España tenemos alrededor de 470 redes de calor de distintos tamaños y usos, con una mayor presencia en el ámbito público. Aunque la progresión en el número de instalaciones no se estanca, es necesario un mayor compromiso de las administraciones en todos sus niveles, desde ayuntamientos al Estado para que las redes de calor con biomasa aporten todo su potencial a la descarbonización del suministro de energía térmica en los sectores residencial, servicios e industrial de España.
ESEFICIENCIA: En la actualidad están vigentes varias convocatorias de ayudas relacionadas con las energías renovables y la eficiencia energética, como el RD 477/2021 relativo a los programas de incentivos para sistemas de autoconsumo y almacenamiento y para sistemas térmicos renovables en hogares y otros sectores de la economía. ¿En qué medida crees que contribuirán estas ayudas a impulsar el sector de la biomasa? ¿Qué otras iniciativas echáis en falta para que el uso de la biomasa sea cada vez mayor en el entramado industrial y en la sociedad en general? ¿Qué valoración haces del sector en la actualidad?
Javier Díaz: En este momento, aplicables a la biomasa, están vigentes distintos programas coordinados desde el IDAE y puestos en marcha por las comunidades autónomas que disponen ayudas al sector residencial, entidades locales y diferentes sectores de la economía para instalar equipos de biomasa, redes de calor o biogás.
No cabe duda de que estas convocatorias contribuirán al establecimiento de nuevas instalaciones de biomasa y, sobre todo, constituyen un claro alineamiento con un futuro de energía renovable, pero también creo que se deberían implantar medidas permanentes que motiven aún más la posibilidad del cambio entre los ciudadanos.
Por ejemplo, una rebaja del IVA a los equipos de combustión y los biocombustibles sólidos del 21% al 10% sería un gran acicate para la expansión de nuevas instalaciones de biomasa. La Comisión Europea ha aprobado una reforma del IVA que contempla la posibilidad de rebajar el impuesto en varios productos.
También sería interesante que la instalación de sistemas de calefacción con biomasa se beneficiara de la reducción del IBI u otros impuestos municipales de la misma manera que ocurre con otras renovables.
Por otra parte, la instalación de equipos de calefacción con biomasa en sustitución de combustibles fósiles en edificios dependientes de las administraciones públicas constituiría un excelente ejemplo para los ciudadanos.
En el ámbito de la generación eléctrica con biomasa, fomentar la construcción de plantas de entre 15 y 20 MWe facilitaría su integración en las zonas de producción de biomasa, evitando largos transportes y favoreciendo una economía local.
España podría abastecer con biomasa todas sus necesidades energéticas durante aproximadamente un mes, según estimaciones de Bioenergy Europe, la asociación europea de la biomasa. Aunque este dato no deja de ser una abstración teórica, nos permite compararnos con el resto de los países. A pesar de nuestro enorme potencial biomásico, seguimos lejos de países como Suecia, Finlandia o Austria, que podrían confiar en la biomasa como fuente energética durante más de 130 días.
Creo que el futuro del sector dependerá de que consigamos hacer ver a la sociedad y a sus gobernantes que la biomasa es fundamental para cumplir los objetivos que nos hemos marcado a nivel internacional.
ESEFICIENCIA: ¿Qué zonas geográficas han aumentado considerablemente el interés y el uso de la biomasa para climatización? ¿Cuáles tienen mayor proyección en España?
Javier Díaz: En España vemos varias tendencias en relación a la calefacción con biomasa. Mientras que en las zonas más frías como Galicia, Castilla y León o Cataluña el uso del pellet predomina tanto en calderas como sistema principal de generación térmica para calefacción y ACS como en estufas para calentar estancias concretas; en el sur, además del pellet, el hueso de aceituna tiene una presencia importante, lo cual es lógico pues es un biocombustible muy cercano y conocido desde hace años.
En segundas residencias de uso vacacional y en zonas de la costa templada, las estufas de pellet tienen un nicho muy interesante por la facilidad de manejo y el acceso fácil al biocombustible, disponible en pequeñas cantidades en centros comerciales y en gasolineras.
ESEFICIENCIA: Avebiom es la unión de los actores principales del sector de la bioenergía que cubren toda la cadena de valor de la biomasa. ¿Cuáles son vuestros principales objetivos? ¿Qué iniciativas lleváis a cabo desde Avebiom y cuáles serán vuestras líneas estratégicas de cara a los próximos meses?
Javier Díaz: Nuestro principal objetivo desde que constituyó la asociación en 2004 es promover el desarrollo del sector en España y contribuir a incrementar el consumo sostenible de biomasa con fines energéticos.
Somos miembro de Bioenergy Europe –la asociación sectorial europea-, formamos parte de su consejo de dirección y en estos momentos ostentamos la presidencia del Consejo Europeo del Pellet (EPC).
Por nuestro compromiso con la calidad de la biomasa y su sostenibilidad apoyamos y participamos en la implantación de varios sistemas de certificación de escala mundial en España como ENplus para los pellets de uso doméstico, BIOmasud para las biomasas mediterráneas, o SURE, el sistema voluntario de certificación de la sostenibilidad de la biomasa dirigido a los agentes que operan dentro del sector de la bioenergía y que necesitan cumplir los requerimientos que impone la nueva directiva europea de Energías Renovables RED II.
Considero muy importante nuestra activa participación en dos mesas intersectoriales de la madera, en Castilla y León y Castilla-La Mancha, para impulsar la necesaria movilización de la biomasa en estas regiones para favorecer la actividad industrial, claro está, pero, lo que es más importante, para preservar la riqueza forestal de los devastadores incendios que parece que se recrudecen cada temporada.
También estamos trabajando para poner en marcha la plataforma nacional para el desarrollo de la agrobiomasa y los gases renovables como materia prima para generar energía limpia y sostenible, recursos fundamentales para completar con éxito el proceso de descarbonización de la economía en nuestro país.
Y, por último, seguimos adelante con nuestros eventos profesionales Expobiomasa 2023 y el Salón del Gas Renovable y el Congreso Internacional de Bioenergía, que se celebran en octubre de este año. Son citas ineludibles para todos aquellos que quieren estar al tanto de la última tecnología e innovaciones y entrar en contacto con el resto de los agentes del sector.