Acordar acciones para acelerar las mejoras en la eficiencia energética que pueden reducir las facturas de energía, aliviar la dependencia de los combustibles importados y acelerar las reducciones de las emisiones de gases de efecto invernadero, ha sido el principal resultado de la Conferencia Global sobre Eficiencia Energética de la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) celebrada del 7 al 9 de junio en Dinamarca, en la que han participado los líderes mundiales en energía y clima. Ministros y representantes de 24 países han emitido una declaración conjunta que destaca la importancia de la eficiencia energética para abordar muchos de los desafíos actuales, como la crisis energética y el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero.
La declaración conjunta ha sido emitida por los ministros y representantes de alto nivel de 24 países, incluidos Francia, Alemania, Indonesia, Japón, México, Senegal y Estados Unidos, además de la Unión Europea y la Unión de África. En el comunicado conjunto se destaca que “la eficiencia energética y la acción del lado de la demanda tienen un papel particularmente importante que desempeñar ahora que los precios mundiales de la energía son altos y volátiles, lo que perjudica a los hogares, las industrias y economías enteras”, y se añade que “la eficiencia energética ofrece oportunidades inmediatas para reducir los costos de energía y reducir la dependencia de los combustibles importados”.
Los gobiernos manifestaron su intención de “seguir buscando oportunidades de intercambio y colaboración para mejorar la formulación de políticas y la implementación de acciones de eficiencia energética”, y pidieron a «todos los gobiernos, la industria, las empresas y las partes interesadas que fortalezcan su acción sobre la eficiencia energética».
Nueva investigación de la IEA
La Agencia Internacional de la Energía ha llevado a cabo una nueva investigación que destaca los beneficios ambientales, económicos y sociales de la acción temprana sobre la eficiencia energética. Según el nuevo análisis de la IEA, titulado ‘The value of urgent action on energy efficiency’, duplicar la tasa global actual de mejora de la intensidad energética al 4% anual tiene el potencial de evitar 95 exajulios al año de consumo final de energía para finales de esta década, en comparación con una vía basada en la configuración política actual. Esto equivale al uso de energía anual actual de China.
Según el documento, ese nivel de ahorro reduciría las emisiones globales de CO2 en 5.000 millones de toneladas adicionales al año para 2030, alrededor de un tercio de los esfuerzos totales de reducción de emisiones necesarios en esta década para llevar al mundo hacia un camino hacia las emisiones netas cero para mediados de siglo.
El informe indica que estos esfuerzos adicionales en eficiencia y áreas relacionadas reducirían el gasto global en energía. Por ejemplo, los hogares podrían ahorrar al menos 650.000 millones de dólares americanos al año en facturas de energía hacia 2030 en comparación con lo que habrían gastado si se hubieran basado en las políticas actuales. Además, el esfuerzo global en eficiencia energética ayudaría a crear 10 millones de empleos adicionales en ámbitos que abarcan desde la modernización de edificios hasta la infraestructura de fabricación y transporte.
El nuevo análisis de la IEA muestra las oportunidades que se presentarían en todos los sectores de la economía global. Según la publicación, la mayoría de estas oportunidades involucran tecnologías fácilmente disponibles y se pagarían por sí mismas a través de menores costos de funcionamiento, especialmente con los elevados precios de la energía actuales. Para 2030, se prevé que alrededor de un tercio de la demanda de energía evitada procederá de la implementación de equipos más eficientes. Alrededor de una quinta parte proviene de la electrificación, como cambiar a bombas de calor o a automóviles eléctricos. La digitalización y el uso de materiales más eficientes en la industria aportan gran parte del resto.