Disminuir el consumo energético de todos los equipamientos del Anillo Olímpico de Barcelona, iniciar el camino hacia la autosuficiencia de toda la actividad ordinaria de los edificios y contribuir a reducir el volumen de emisiones de gases contaminantes. Esos son los objetivos de las dos futuras instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo en el Palau Sant Jordi y en el Estadi Olímpic que está poniendo en marcha la empresa pública Barcelona de Servicios Municipales (B:SM).
La cubierta del Sant Jordi Club y la pérgola del Estadio Olímpico de Barcelona acogerán las dos instalaciones fotovoltaicas para el autoconsumo de todas las edificaciones del Anillo Olímpico. Según las estimaciones realizadas por B:SM, el uso de energía solar podría evitar la emisión de 190 toneladas de gases contaminantes cada año, generando un ahorro de 70.000 euros en el gasto energético.
Está previsto que el proyecto, que tiene un presupuesto aproximado de 628.000 euros, se materialice a mediados de 2024.
Ubicación de las placas solares y resultados
Las placas solares del Palau Sant Jordi se ubicarán en la cubierta del Sant Jordi Club, cubriendo una superficie de 1.650 m2. Serán en total 640 módulos capaces de producir 513.000 kWh anuales.
Por su parte, la instalación fotovoltaica del Estadio Olímpico se localizará en dos zonas de la pérgola, separadas una de otra por las características arquitectónicas de la marquesina. Entre estos dos nodos, que ocuparán una superficie de 1.187 m2, el Estadi contará con 592 módulos preparados para generar 281.000 kWh al año, aproximadamente.
Las estimaciones realizadas por Barcelona de Servicios Municipales, gestora del Anillo Olímpico, calculan que podría evitarse la emisión de 190 toneladas de gases contaminantes cada año. Además, el ahorro en el gasto energético podría superar los 70.000 euros y la inversión se recuperaría en un plazo inferior a los 10 años.