En los edificios municipales de Pallejà, Corbera de Llobregat y Sant Boi de Llobregat, pertenecientes a la comarca del Baix Llobregat, el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha instalado calderas de biomasa que constituyen una red de calor para suministrar agua caliente y calefacción a estos equipamientos públicos. Esta iniciativa forma parte del Programa de actuaciones en paisajes naturales y urbanos (PSG), un plan con una triple estrategia: gestión forestal, energías renovables y espacios públicos.
El AMB ha instalado tres calderas de biomasa que calentarán el agua y calefactarán una escuela, una comisaría local, un complejo escolar y deportivo y otros edificios municipales de Pallejà, Corbera de Llobregat y Sant Boi de Llobregat. Además, está construyendo dos calderas de biomasa más en Torrelles de Llobregat y Sant Climent de Llobregat, que entrarán en funcionamiento durante el primer trimestre de 2022.
La inversión, de 1,1 millones de euros, se integra en el Programa de actuaciones en paisajes naturales y urbanos del AMB, cuyo objetivo es potenciar la gestión forestal de las montañas de esta zona, impulsar las energías renovables en un proceso de economía circular y de reaprovechamiento y optimizar los recursos económicos de las arcas públicas.
Tres calderas de biomasa
La caldera de Pallejà, con un coste de 165.000 euros, se ha colocado en la Escola Àngel Guimerà. Este equipo tiene una potencia de 100 kW, que calentará una superficie de 2.500 m2. El consumo anual de astilla forestal previsto será de 25 toneladas, lo que ahorrará 28,5 toneladas de CO2/año, con menor emisión de gases de efecto invernadero. El Ayuntamiento calcula que ahorrará anualmente 6.800 euros.
Por su parte, la caldera de Corbera de Llobregat, con una inversión de 260.000 euros, se ha construido en las instalaciones de la policía municipal, el edificio de promoción económica y la Oficina de Atención Ciudadana. El consistorio municipal calcula que el ahorro económico será de 5.300 euros anuales.
Por último, la red de calor de Sant Boi de Llobregat, dotada con 685.000 euros, dará servicio a la zona de equipamientos de la Parellada: escuela, complejo polideportivo y vestuarios del campo de fútbol. Con una potencia de 500 kW, la caldera calienta un área de 7.800 m2, incluida una piscina cubierta climatizada de 25 metros. Esta nueva instalación permitirá ahorrar 100.000 m3 de gas natural al año y evitará la emisión de 200 toneladas de CO2 al año a la atmósfera. El funcionamiento de la caldera comportará un ahorro anual de 52.298,27 euros para las arcas municipales.
Triple estrategia
Estas calderas en el Baix Llobregat aglutinan una serie de estrategias y actuaciones que el AMB impulsa desde otros ámbitos y servicios. Por una parte, se impulsa la gestión forestal de la infraestructura verde metropolitana con un doble objetivo: potenciar un mosaico agroforestal que reduzca el riesgo y la propagación de incendios forestales y favorezca la actividad agraria y, por otro lado, estimular la industria de la madera como actividad económica dentro del territorio metropolitano.
Asimismo, se promueve el uso de energías renovables en las instalaciones públicas mediante el reaprovechamiento de una materia prima de proximidad. En este sentido, el Plan clima y energía 2030 del AMB también quiere conseguir que todos los ayuntamientos metropolitanos, de cara al 2030, utilicen sólo energías renovables para abastecerse para sus servicios (equipamientos públicos y alumbrado). Por este motivo, el AMB está trabajando, por un lado, para reducir a la mitad los consumos actuales de energía de los edificios públicos y, por otro, para duplicar la capacidad de generación de energía, instalando cubiertas solares, fotolineras y pérgolas fotovoltaicas, entre otros.
Esta instalación de calderas de biomasa supone un paso más hacia el suministro energético y complementa las tareas de diseño y construcción de equipamientos y espacios que llevan a cabo desde Espai Públic (avenidas, calles, polideportivos, escuelas, bibliotecas, etc).