Después del primer año de la implantación y funcionamiento en un district heating del sistema de recargas energéticas de Stechome, los resultados reflejan su efectividad desde el punto de vista económico, energético y social. Esta metodología para la gestión energética residencial permite controlar el consumo, el coste y un proceso de empoderamiento energético real.
Este servicio de Stechome gestiona los consumos eléctricos, de calefacción y de agua sanitaria, siendo recargable desde cualquier smartphone, tablet o PC desde una cuenta bancaria o tarjeta de crédito. El sistema ayuda a los usuarios a gestionar su consumo, coste y confort, conociendo de primera mano toda la información energética de su vivienda.
Stechome explica que, con la implantación de este sistema, se ha demostrado que se han optimizado los recursos públicos minimizando gastos. En concreto, los usuarios han podido ahorrar más de un 10% sin necesidad de realizar ninguna inversión previa, eliminando al 100% la morosidad energética, y han adquirido el aprendizaje de unos hábitos de consumo más eficientes, gracias al conocimiento en tiempo real de su consumo y coste reales.
Asimismo, el sistema ha permitido identificar situaciones y comportamientos que han requerido un tratamiento social, canalizando a través del sistema ayudas económicas para combatir la pobreza energética.
Resultados obtenidos
El resultado es un porcentaje de impacto de morosidad medio del 4,80% donde sólo 8 viviendas se encuentran con saldo negativo a finales de este otoño.
A lo largo del último año, y con una ocupación media de 158 viviendas sobre 162 que tiene el edificio, el porcentaje de viviendas que han estado en algún momento en una situación de saldo negativo no ha llegado al 5%. Esta situación no afecta al impacto energético del conjunto, ya que los usuarios con saldo negativo no pueden hacer uso de los suministros energéticos hasta alcanzar una situación de saldo positivo. Y la media del saldo negativo de estas viviendas no ha superado los 30 euros mensuales, lo que según la compañía ha facilitado una gestión económica eficaz y sin tensiones de tesorería.
El 82% de las recargas energéticas realizadas han sido a través de una cuenta bancaria convencional y sólo el 15% se han realizado utilizando una tarjeta de crédito o débito. El resto se ha llevado a cabo mediante la realización de transferencia o ingresos a través de cajeros automáticos.
Gracias a estos resultados y sus efectos positivos en el ámbito de la eficiencia energética, el ahorro y la sostenibilidad, Stechome confirma que un año después los usuarios de esta red de calor se han habituado fácilmente al sistema, realizan procesos de recarga con un bajo nivel de devoluciones, demostrando responsabilidad y compromiso, y la cuenta bancaria de su comunidad está completamente saneada.
Otros proyectos para la recarga energética
Cada vez más entidades públicas o privadas de vivienda social de alquiler habitual o vacacional, comunidades de propietarios y administradores de fincas, se lanzan a utilizar esta metodología con la que se logra eliminar la morosidad vinculada a los sistemas centralizados, así como a mantener una independencia total gracias al control y gestión en tiempo real del consumo de manera automática.
Esta fórmula de recarga energética para el cobro de agua caliente y calefacción ya ha sido implantada en otras promociones de vivienda pública y privada. Actualmente se están desarrollando proyectos en Madrid, Asturias, Sevilla y Galicia, y próximamente se desarrollará un gran proyecto que permitirá a más de 2.000 viviendas disponer de las herramientas adecuadas y la información necesaria para luchar contra la morosidad y empoderarse frente a la energía.