La Dirección General de Vivienda del Gobierno de Cantabria ha puesto en marcha el programa de Rehabilitación Energética de Edificios (PREE) dotado con 3,9 millones de euros. Las subvenciones se destinarán a actuaciones de mejora en la eficiencia energética de las instalaciones de iluminación, uso de energías renovables en las instalaciones térmicas, y mejora de la envolvente térmica.
El nuevo programa de Rehabilitación Energética de Edificios (PREE) está destinado a subvencionar obras encaminadas a reducir el consumo de energía y las emisiones de dióxido de carbono, y podrá solicitarse hasta el próximo 31 de julio. Es compatible con la convocatoria ordinaria de subvenciones a la rehabilitación. De esta forma los beneficiarios podrán recibir ayudas de hasta el 75% del coste total de la obra.
La Dirección General de Vivienda destinará este año 9 millones de euros a subvencionar obras de rehabilitación, lo que supone un 80% más que en el ejercicio anterior. El objetivo es aumentar el número de rehabilitaciones energéticas del parque edificado, para impulsar la regeneración urbana y recuperar la ciudad construida, además de incidir en el ahorro de energía y en la reducción de emisiones de CO2. Con ello, además, se dará apoyo a la economía y a la creación de empleo con la reactivación de sectores como el de instaladores, construcción o energías renovables.
Tres tipos de actuaciones
Las ayudas previstas en el programa de Rehabilitación Energética de Edificios recogen tres tipos de actuaciones: envolvente térmica, uso de energías renovables en las instalaciones térmicas (calefacción, climatización, refrigeración, ventilación y agua caliente sanitaria) y la mejora en la eficiencia energética de las instalaciones de iluminación.
Pueden solicitar estas ayudas tanto personas físicas propietarias de edificios, como comunidades de propietarios, empresas y autónomos, entidades sin ánimo de lucro y asociaciones, entidades locales y del sector público y arrendatarios de edificios. El plazo de ejecución de las obras es de 18 meses.
Actuaciones integradas
También se incentivan las actuaciones integradas, es decir, aquellas que acometan mejora en dos o más tipologías. En este caso, la mejora sobre el porcentaje inicial será del 20%. Para acceder a ella, una de las mejoras debe ser sobre la envolvente térmica y ha de suponer una disminución mínima de la demanda global de calefacción y refrigeración del 30%. Esta medida tiene que combinarse con otra actuación sobre la instalación térmica que suponga, al menos, la sustitución del 60% de la potencia de generación térmica existente o, en el caso de los edificios de uso diferente a la vivienda, con mejoras sobre la iluminación que impliquen un ahorro del 25% por ese concepto.
Estas ayudas son de concesión directa y se van a resolver por estricto orden de presentación, con un apoyo especial a colectivos desfavorecidos, en cuyo caso las ayudas se incrementarán un 15%. De igual manera se aplicará este porcentaje a viviendas de protección pública que se ubiquen en Áreas de Regeneración y Renovación Urbanas.
Mejora de la calificación energética
Las actuaciones de rehabilitación deberán ser sobre un edificio de viviendas o bien sobre uno de uso no residencial como puede ser el sanitario, administrativo, docente o cultural.
En todos los casos, los solicitantes deberán acreditar que la rehabilitación para la que solicitan subvención mejorará la calificación energética total del edificio en, al menos, una letra medida en la escala de emisiones de dióxido de carbono con respecto a la calificación energética inicial del edificio. «Para incentivar aquellas actuaciones más eficientes, a mayor mejora de la eficiencia mayor porcentaje de subvención”, ha explicado la consejera.