El Ayuntamiento de Madrid y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han firmado un protocolo de colaboración para elaborar un plan de monitorización que ayude a medir los principales hábitos de consumo energético en viviendas de la capital.
Este programa de monitorización se encuadra dentro del Plan Rehabilita 2020, una línea de ayudas aprobada este año por el Área Delegada de Vivienda que subvenciona actuaciones de accesibilidad, regeneración, eficiencia energética y salubridad en viviendas y edificios de la capital.
La monitorización permitirá medir y evaluar los indicadores de consumo y confort en una muestra de los inmuebles que sean rehabilitados energéticamente dentro de este plan de ayudas, ofreciendo beneficios en la subvención que hayan solicitado a los voluntarios que quieran participar en esta iniciativa.
Ahorro energético eficaz
La iniciativa supondrá la obtención de una información imprescindible sobre los hábitos de consumo de los vecinos en edificios de viviendas y permitirá la elaboración de recomendaciones para promover un ahorro energético más eficaz. Igualmente, servirá para la elaboración de estadísticas divulgativas para toda la ciudadanía madrileña. En definitiva, el objetivo es controlar, con datos reales, cómo estas obras de rehabilitación energética influyen en los indicadores de sostenibilidad de los inmuebles.
Para la realización de las actuaciones contenidas en este plan, el Ayuntamiento contará con el CSIC, a través de su grupo de investigación Sistemas Constructivos y Habitabilidad en Edificación, del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja. Este grupo de investigación viene desarrollando desde hace años diferentes proyectos de I+D+i relacionados con la rehabilitación de viviendas sociales en Madrid como es la monitorización de las condiciones ambientales interiores y de los consumos energéticos de un importante número de viviendas.
Finalidad del Plan Rehabilita
‘Rehabilita 2020’ subvenciona cuatro líneas de actuaciones, siempre en elementos comunes de los edificios: la mejora de la accesibilidad de los inmuebles; la conservación de fachadas, cubiertas o estructuras; la mejora de la eficiencia energética, cuyos trabajos engloban el aislamiento de fachadas, sustitución de calderas o instalación de cubiertas verdes y puntos de recarga de vehículos eléctricos; y el fomento de la salubridad (en relación con el amianto, radón y calidad del aire interior). El objetivo es ayudar a 5.000 familias, con un plan que además generará 1.700 empleos.
La finalidad del Plan Rehabilita 2020 no solo es mejorar el tejido residencial de Madrid, sino conocer con datos fiables los beneficios que en materia de salud, habitabilidad y eficiencia energética están generando las actuaciones de rehabilitación incluidas en él. Y, sobre todo, permitir que los ciudadanos puedan acceder a una valiosa información sobre sus hábitos de consumo y tengan recomendaciones eficaces de ahorro energético.