Con el fin de reparar los daños económicos y sociales ocasionados por la pandemia del coronavirus, la Consejo Europeo ha llegado a un acuerdo sobre el Plan de Recuperación Económica con un fondo de 750.000 millones de euros, de los que 390.000 corresponden a ayudas directas a los Estados miembros y 360.000 serán préstamos en condiciones favorables. A este fondo de recuperación se une el Marco Financiero Plurianual para los próximos siete años.
Las inversiones se movilizarán a través de dos mecanismos. Por un lado, Next Generation EU, que destinará al presupuesto de la UE una nueva financiación obtenida en los mercados financieros durante el periodo 2021-2024 (750.000 millones de euros) y, por otro lado, el Presupuesto Europeo a largo plazo reforzado para el periodo 2021-2027 (casi 1,1 billones de euros).
Según ha concretado el Gobierno español, los recursos del fondo se repartirán atendiendo a los países que están más afectados por la crisis y, en consecuencia, España será el segundo más beneficiado, con una asignación total de en torno a 140.000 millones de euros, lo que representa el 11% del Producto Interior Bruto en el año 2019. De esta cantidad, 72.750 millones llegarán en forma de transferencias directas, que se tendrán que ejecutar entre los años 2020 y 2026, y el resto de los recursos en forma de préstamos.
El Gobierno ha destacado que, dentro del fondo, el denominado Mecanismo de Recuperación y Resiliencia contará con 672.000 millones de euros, 312.500 en transferencias, de los que a España le corresponden 59.000 millones. El Gobierno podrá impulsar así un plan nacional de reformas e inversiones con la apuesta por un crecimiento verde, digital, la innovación, la ciencia, la educación y la formación de capital humano.
Energías renovables y modernización de edificios
Para relanzar la economía europea, Europa sigue comprometida con las transiciones ecológica y digital. De esta forma, el Pacto Verde Europeo y un mercado único más digital son las estrategias clave del crecimiento planteado en el acuerdo alcanzado por los líderes de la UE.
En este marco, todo el dinero recaudado mediante Next Generation EU y el nuevo presupuesto de la UE se canalizará a través de los programas de la UE hacia una gran variedad de acciones. Entre otras cuestiones, se contempla un nuevo plan de acción sobre las materias primas críticas que reforzará los mercados cruciales de la movilidad eléctrica, las baterías, las energías renovables y las aplicaciones digitales, entre otros.
También se apostará por una Oleada de Renovación masiva para modernizar los edificios y las infraestructuras críticas de Europa, incluida la construcción de un millón de puntos de recarga para vehículos eléctricos.
Asimismo, el Fondo de Transición Justa apoyará el reciclaje profesional de los trabajadores y creará oportunidades económicas para las pequeñas y medianas empresas, se contempla la creación de un millón de nuevos empleos verdes y la apuesta por una economía más circular.
La Unión Europea también trabajará para una verdadera economía digital y de datos como motor de innovación y creación de empleo. Las tecnologías como la inteligencia artificial, la ciberseguridad, los datos y la infraestructura de computación en nube, las redes 5G y 6G, los superordenadores y los ordenadores cuánticos, y las tecnologías de blockchain tendrán efectos expansivos y aumentarán la autonomía estratégica de Europa.