El Gobierno de Castilla-La Mancha ha renovado su quinto convenio de colaboración con Cruz Roja para el desarrollo del Plan Regional contra la Pobreza Energética en el año 2020. La rúbrica de este acuerdo se llevó a cabo el pasado 17 de abril en el marco de un protocolo de colaboración firmado entre ambas entidades con el objetivo de atender situaciones de pobreza económica derivadas de la crisis sanitaria del Covid-19.
La firma del convenio de colaboración del Plan Regional contra la Pobreza Energética incluye la ayuda económica de 150 euros, cuando lo prescriba el trabajador social o trabajadora social de Atención Primaria. También contempla la incorporación de las Ayudas de Emergencia Social para prevenir cortes de suministros energéticos.
Según ha declarado la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, se trata de un acuerdo que tiene aplicación durante todo el año hasta diciembre de 2020 y que fue uno de los primeros que se llevaron a cabo en España para ayudar a las personas y familias con problemas para el pago de suministros energéticos.
La consejera ha apuntado que, según los datos de 2019, se beneficiaron 18.474 personas y de ellos 8.400 eran menores.