El Pacto Verde Europeo, con el que la Unión Europea quiere convertirse en el primer continente neutral en clima para el año 2050, cuenta con un Plan de Inversiones. El Plan de Inversiones del Pacto Verde Europeo, que fue presentado el 14 de enero, movilizará la inversión pública y contribuirá al desbloqueo de fondos privados a través de los instrumentos financieros de la UE, principalmente InvestEU, lo que podría traducirse en un mínimo de un billón de euros de inversiones.
El citado plan movilizará financiación de la UE y creará un marco adecuado para facilitar y estimular las inversiones públicas y privadas necesarias para la transición hacia una economía climáticamente neutra, ecológica, competitiva e inclusiva.
Financiación, capacitación y apoyo
El Plan de Inversiones del Pacto Verde Europeo se basa fundamentalmente en tres pilares fundamentales. En primer lugar, destaca la financiación, con la movilización de un mínimo de un billón de euros de inversiones sostenibles en la próxima década. Según un comunicado de la Comisión Europea, el mayor porcentaje de la historia de gasto público en acción por el clima y en favor del medio ambiente con cargo al presupuesto de la UE atraerá la financiación privada, en lo que desempeñará un papel clave el Banco Europeo de Inversiones.
En segundo lugar, se llevará a cabo la aportación de incentivos para desbloquear y reorientar las inversiones públicas y privadas. De esta manera, la UE proporcionará herramientas para los inversores al considerar la financiación sostenible un elemento central del sistema financiero, y facilitará las inversiones sostenibles de las autoridades públicas, fomentando el presupuesto y la contratación ecológicos, y creando formas de facilitar los procedimientos de aprobación de ayudas estatales para las regiones en transición.
Asimismo, la Comisión Europea prestará apoyo a las autoridades públicas y a los promotores de proyectos con vistas a la planificación, diseño y ejecución de proyectos sostenibles.
Mecanismo para una Transición Justa
Si bien todas las regiones necesitarán financiación, el Mecanismo para una Transición Justa proporciona apoyo específico para contribuir a la movilización de un mínimo de 100.000 millones de euros durante el período 2021-2027 en las regiones más afectadas, a fin de mitigar el impacto socioeconómico de la transición.
El Mecanismo para una Transición Justa constará de tres fuentes principales de financiación. Por un lado, el Fondo de Transición Justa, que recibirá 7.500 millones de euros de nuevos fondos de la UE, además de la propuesta de la Comisión para el próximo presupuesto a largo plazo de la UE.
Para aprovechar su participación en el Fondo, los Estados miembros, en diálogo con la Comisión, tendrán que determinar los territorios elegibles a través de planes territoriales de transición territoriales específicos, además de comprometerse a aportar un euro por cada euro del Fondo de Transición Justa con cargo al Fondo Europeo de Desarrollo Regional y del Fondo Social Europeo Plus, y proporcionar recursos nacionales adicionales. En conjunto, esto proporcionará entre 30.000 y 50.000 millones de euros de financiación.
Otras fuentes de financiación
La segunda de las fuentes principales de financiación del Mecanismo para una Transición Justa será el Régimen de transición específico con cargo a InvestEU, que movilizará inversiones por un importe de hasta 45.000 millones de euros. Este régimen procurará atraer inversiones privadas, por ejemplo, en energía sostenible y transporte, que beneficien a estas regiones y ayuden a sus economías a encontrar nuevas fuentes de crecimiento.
Por último, la tercera fuente será el mecanismo de préstamos al sector público del Banco Europeo de Inversiones respaldado por el presupuesto de la UE, que movilizará entre 25.000 y 30.000 millones de euros en inversiones. Servirá para conceder préstamos al sector público, por ejemplo, para inversiones en las redes de calefacción urbana y la renovación de edificios. La Comisión presentará una propuesta legislativa para su creación en marzo de 2020.
Además de la financiación, el Mecanismo para una Transición Justa abarca la asistencia técnica a los Estados miembros y los inversores, y garantizará la participación de las comunidades afectadas, las autoridades locales, los interlocutores sociales y las organizaciones no gubernamentales.