Emiliano Bernardo Muñoz fue elegido nuevo presidente de Agremia, Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía, en la Asamblea General celebrada el pasado mes de mayo. En esta entrevista nos cuenta en qué consiste la actividad y cuáles son los objetivos de esta organización. Además, nos presenta los servicios que pone a disposición de sus asociados para que afronten los grandes retos que la digitalización o la transición energética suponen para el colectivo de los instaladores.
ESEFICIENCIA: Agremia agrupa a unas 2.000 empresas instaladoras. ¿En qué consiste la actividad de Agremia y cuáles son sus objetivos? ¿Qué servicios ofrece a sus asociados y cuáles son las ventajas de las empresas instaladoras adheridas a la asociación?
Emiliano Bernardo: Agremia es la Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía, fundada en su día bajo el nombre de Asefosam, y a fecha de esta entrevista agrupa a 2.019 empresas instaladoras y mantenedoras del sector de las instalaciones.
Como asociación empresarial, su principal objetivo es la representación de los intereses del colectivo al que agrupa ante la Administración, resto de organizaciones patronales y sindicales y el conjunto de empresas del sector, así como la prestación a sus empresas asociadas de todo tipo de servicios que contribuyan a mejorar su competitividad.
Así, las empresas miembros de Agremia disponen de un instrumento a través del cual hacer valer sus intereses y reivindicaciones, al tiempo que tienen a su disposición un conjunto de profesionales que ofrecen asesoramiento especializado en las áreas técnica, jurídica, laboral y fiscal, que les prestan un servicio de gestoría administrativa, que les mantienen continuamente informados de las novedades del sector a través de diversas vías (web, revista, circulares, RRSS, etc.), con especial atención a la labor que, en materia de formación, lleva desarrollando la asociación en sus más de cuarenta años de vida a través de una Escuela Técnica que hoy en día es referente en el sector.
ESEFICIENCIA: La última Asamblea General de Agremia aprobó la elaboración del nuevo Plan 2020-2022. ¿Qué líneas prioritarias se perfilan dentro de esta nueva estrategia?
Emiliano Bernardo: Efectivamente, en la pasada Asamblea General celebrada en el mes de mayo, se aprobó la elaboración de un nuevo Plan Estratégico que sucediera y diera continuidad al Plan 2017-2019, cuya vigencia finaliza este año.
Aunque los trabajos de elaboración aún no han comenzado y se desarrollarán durante este otoño, la labor de la asociación seguirá estando basada en los dos grandes pilares que constituyen su propia razón de ser: el servicio al asociado y la formación de los profesionales del sector. Esto es, tener al asociado – sus necesidades e intereses – como centro de toda iniciativa, y la formación como vector fundamental de crecimiento, diversificación y especialización de un sector en continua evolución e innovación.
Asimismo, la transparencia y profesionalidad en la gestión seguirán siendo elementos clave de la actividad de Agremia y continuaremos trabajando por poner en valor la figura del pequeño empresario y la consecución de alianzas estratégicas con el resto de agentes del sector.
ESEFICIENCIA: En la Asamblea General también se valoró positivamente la puesta en marcha de nuevos proyectos y las acciones formativas con el objetivo de recuperar la figura del aprendiz. ¿Qué actividades tienen previstas?
Emiliano Bernardo: En estos últimos años con el sensible incremento generalizado de la actividad en nuestro sector, la figura del aprendiz ha quedado paradójicamente relegada a un segundo plano o incluso ha desaparecido por completo, fundamentalmente por la problemática existente a la hora de ofrecer la formación necesaria para este tipo de trabajadores/alumnos. Esta formación debe ser realizada en centros acreditados para la impartición de certificados de profesionalidad relacionados con la actividad profesional que va a desarrollar el trabajador aprendiz dentro de la empresa. Es en este punto donde entra en juego nuestra Escuela.
Actualmente tenemos en marcha dos proyectos de Formación Profesional Dual de los que nos sentimos especialmente orgullosos.
Uno de dichos proyectos se desarrolla desde el ámbito de la formación reglada en colaboración con dos centros de formación profesional (IES Tomás y Valiente y el IES Antonio Machado), con el objeto de hacer ver a nuestros jóvenes y a sus familias que el sector les ofrece un atractivo futuro profesional en el que cuestiones como la innovación tecnológica, la automatización o la eficiencia energética son elementos básicos de una profesión que tradicionalmente no ha gozado de un gran prestigio social. Más de 30 jóvenes han participado de esta experiencia que ha sido altamente satisfactoria.
Paralelamente, se está desarrollando un proyecto pionero en España, de la mano de la Fundación Avintia, Fundación Endesa, Madrid Norte Joven y la empresa asociada a Agremia Aclimar. Agremia ofrece cualificación profesional a jóvenes que carecen de ella y que, por distintos motivos, habían abandonado la formación reglada.
Paralelamente a la formación estos jóvenes están trabajando con contrato de formación en empresas del sector de las instalaciones. A fecha de hoy son tres cursos y casi 40 jóvenes los que se han formado y a la vez están trabajando en el sector.
Asimismo, tenemos en marcha otros proyectos, orientados a impulsar la formación y el reciclaje on-line, la electrificación del sector, la digitalización de las empresas o el relevo generacional.
ESEFICIENCIA: ¿Cómo describe la situación actual del sector de las instalaciones y la energía? ¿Cuáles son los últimos logros alcanzados por estos profesionales y qué deficiencias deberían ser solventadas?
Emiliano Bernardo: Nos encontramos en un momento particularmente interesante, en el que los profesionales de la instalación estamos en el centro de todo un proceso en el que se está pasando de un modelo energético basado en fuentes de energía fósil en el que la máxima era la seguridad, a un modelo que, sin abandonar el valor seguridad, apuesta específicamente por la eficiencia y la sostenibilidad.
Ello lleva aparejado un cambio en el diseño de las instalaciones, en el incremento de la eficiencia energética de los generadores de frío y calor, en la automatización de la gestión y control de las instalaciones, en un cambio del papel de las tradicionales compañías suministradoras de energía tras el proceso de liberalización del mercado, y un cambio en los hábitos de consumo y en la conciencia ambiental de los consumidores.
Todo esto hace que las empresas instaladoras y mantenedoras deban también convertirse en agentes particularmente cualificados que ofrezcan un asesoramiento y un servicio integral a sus clientes. Para ello, la labor de formación y reciclaje profesional es particularmente importante, pero a su vez también es necesario contar con su criterio y experiencia a la hora de desarrollar el marco normativo en el que debe desenvolverse su actividad.
En este sentido, la normativa debe ser clara y ofrecer seguridad jurídica para todos los interesados (empresas energéticas, proyectistas, fabricantes, instaladores, clientes, etc) y debe ser lo más homogénea posible, evitando asimetrías de difícil justificación entre las distintas regiones del territorio nacional.
ESEFICIENCIA: El pasado mes de abril, el Consejo de Ministros dio luz verde al Real Decreto que hace viable el autoconsumo eléctrico individual y colectivo conectado a red. ¿Qué retos de futuro supone para los profesionales de las instalaciones energéticas en las edificaciones esta nueva normativa?
Emiliano Bernardo: Uno de los cambios en los usos de consumo a los que antes aludíamos, viene marcado por la posibilidad de implantar sistemas de autoconsumo que fomenten el uso de las energías renovables y mejoren la eficiencia energética de nuestros edificios.
En este sentido, una adecuada fiscalidad que promueva el uso de estos sistemas, sin descuidar la necesaria garantía de suministro, dentro de un marco técnico y administrativo que ofrezca seguridad y estabilidad, son las claves para que los consumidores apuesten por este tipo de instalaciones.
Desde el punto de vista de los profesionales, se abre así un nuevo nicho de mercado que exige formación y especialización, de modo que puedan ofrecer a sus clientes servicios de instalación y mantenimiento que les garanticen que sus instalaciones funcionarán en las mejores condiciones de eficiencia durante toda su vida útil.
ESEFICIENCIA: Por otra parte, las medidas adoptadas en la Unión Europea para restringir el uso de gases fluorados han exigido que los fabricantes adapten sus productos a los nuevos requerimientos. ¿Conoce el ciudadano las implicaciones de la normativa referida a la instalación y manipulación de equipos de climatización? ¿Qué papel juegan los instaladores en este escenario y cómo se preparan para los nuevos retos?
Emiliano Bernardo: Por regla general, el ciudadano medio desconoce los requerimientos técnicos que son de aplicación a los equipos de climatización a los que afecta la normativa a la que usted alude.
Precisamente por ello, la labor de asesoramiento del profesional de las instalaciones es clave a la hora de hacer cumplir dicha normativa y de lograr instalaciones eficientes, que cumplan con los requerimientos en materia de uso de equipos que funcionan con gases fluorados, así como para su adecuado mantenimiento, reparación y, llegado el momento, sustitución, garantizando una adecuada gestión de los residuos – equipos eléctricos y electrónicos, gases refrigerantes, aceites, etc. – que resultan de todo ese proceso.
En este sentido, es clave que la distribución cumpla con su obligación de velar porque todo equipo puesto en el mercado sea instalado por una empresa habilitada.