Reducir el número de personas afectadas por la pobreza energética mediante el empleo de fuentes renovables para usos térmico y eléctrico en sus hogares, mejorando así su calidad de vida y su salud, es el objetivo principal del proyecto Powerty “Renewable energies for vulnerable groups”, liderado por la Agencia Andaluza de la Energía, y que ha sido aprobado recientemente por la Comisión Europea en el marco del Programa Interreg Europe 2014-2020.
Con un presupuesto de 1.102.291 euros (el 83,6% cofinanciado por la Comisión Europea) y una duración de tres años y medio, Powerty diseñará un plan de acción para cada una de las regiones involucradas en el proyecto, que abordará retos en cuatro ámbitos: tecnológico, financiero, regulatorio y social.
Desde el punto de vista de la innovación, Powerty promocionará soluciones innovadoras de bajo coste en el sector de las energías renovables y un mayor conocimiento de la sociedad de este tipo de instalaciones. En el ámbito económico, el proyecto tendrá también un efecto positivo para las empresas del sector de las energías renovables, que aumentarán su actividad, lo que incidirá en la creación de empleo especializado. Este efecto positivo también incidirá en la sociedad, ya que el proyecto busca una mayor participación de los ciudadanos vulnerables en la puesta en marcha de las instalaciones de energía renovable.
Socios del Consorcio Powerty
Junto a la Agencia Andaluza de la Energía, destaca la participación en el consorcio de la Universidad de Manchester, que lidera el Observatorio Europeo de Pobreza Energética, iniciativa impulsada por la Comisión Europea y encargada de analizar todas las iniciativas europeas en el ámbito de la pobreza energética.
El resto de socios del proyecto son la Agencia de Energía de Plovdid (EAP) en Bulgaria (uno de los países europeos con las tasas más altas de pobreza energética), la Agencia de Medio Ambiente y Energía de la región de Auvergne Rhône-Alpes (AURA-EE) de Francia, Agglomeration Opole Trust (AOT) (una federación de 20 municipios de Polonia) y la Agencia de Desarrollo de Inversiones Públicas de Lituania (VIPA).
Participación de expertos en pobreza energética
Además de los socios, también tendrán un papel relevante los “stakeholders”, entidades públicas o privadas que desarrollan una actividad relacionada directamente con la temática del proyecto.
En el caso de Andalucía, participan la Asociación de Ciencias Ambientales (ACA), que es además el representante español en el Observatorio Europeo de Pobreza Energética, o la Asociación de Energías Renovables de Andalucía (CLANER), así como organizaciones de consumidores, cooperativas energéticas, entidades sin ánimo de lucro, empresas energéticas, universidades andaluzas y centros de investigación y entidades de financiación de la “banca ética”, entre otros.