La Xunta de Galicia agotó, en los dos primeros días de plazo, el crédito para las ayudas dirigidas a particulares destinadas a la realización de proyectos de uso térmico con biomasa, aerotermia y solar térmica. El pasado lunes 15 de abril se abrió la convocatoria para acceder a estos apoyos económicos. Según la nota de prensa emitida por la Consellería de Economía, Empleo e Industria, el día 17 de abril tan sólo había fondos para las iniciativas con geotermia.
En el caso de las ayudas para proyectos de energías renovables de uso térmico, la convocatoria cuenta con un presupuesto de 2,5 millones de euros. En concreto, 0,5 millones para instalaciones de aerotermia (que se agotaron al llegar a las 164 solicitudes); un millón para biomasa (que se cubrieron con 530 solicitudes); 50.000 euros para solar térmica (que se agotó al recibir la vigésima solicitud) y 956.000 euros para geotermia, una línea de ayudas para la que, tras 80 solicitudes, aún quedan fondos, siempre teniendo en cuenta el comunicado con fecha 17 de abril.
A través de este programa, se apoya la instalación de estufas de aire, cocinas calefactoras, cambio de quemadores, paneles solares térmicos, bombas de calor o calderas que, en el caso de la biomasa, se destinarán a zonas densamente pobladas, ya que para las otras zonas ya se convocó este año una orden específica.
La ayuda es del 50% con una cuantía de 60.000 euros como máximo por proyecto. Se espera movilizar cinco millones de euros y la generación de unos 50 empleos para desarrollar estas iniciativas.
En el caso de los proyectos de energía fotovoltaica, también destinados a particulares, las ayudas están dirigidas a instalaciones para la generación de electricidad mediante paneles fotovoltaicos. Los apoyos serán del 50% y la cuantía máxima por proyecto de 50.000 euros.
Cultura de eficiencia y del ahorro energético
Estas ayudas forman parte del compromiso de la Xunta por acercar a ciudadanos, empresas y administraciones a la cultura de la eficiencia y del ahorro energético y se suman las ayudas que ya se convocaron en 2019, como los apoyos para la instalación de calderas de biomasa para familias y comunidades de propietarios en zonas no densamente pobladas; el programa destinado a empresas y autónomos del sector servicios e industria para la realización de auditorías energéticas e implantación de sistemas de gestión y proyectos de ahorro y eficiencia; o la línea para impulsar las energías renovables y la eficiencia energética en el sector agrícola primario.
La buena respuesta que están teniendo las convocatorias es una muestra de la apuesta e implicación de los gallegos por la eficiencia y por el ahorro energético. La Xunta destaca también la colaboración de las entidades adheridas que, sumando estas dos convocatorias, llegan a un total de 653.