Benalmádena adjudica la instalación de 3.000 lámparas led que reducirán la potencia en más del 60%

El concejal de Comercio y Vía Pública, Bernardo Jiménez; y el concejal de Servicios Operativos, Salvador Rodríguez.

El Ayuntamiento de Benalmádena ha concluido el proceso de adjudicación de contrato para la instalación de 3.000 lámparas led en las principales calles y avenidas de Benalmádena, que comenzarán a instalarse a principios del próximo año. Las nuevas luminarias tendrán una reducción media de la potencia del 63%.

El proceso de adjudicación ha tardado dos años en culminar.

Las nuevas luminarias van a suponer una reducción media de la potencia del 63%, “lo que implicará un ahorro energético en el consumo de un 67%, además de disminuir en 654,49 toneladas la emisión anual de CO2 a la atmósfera, por lo que es una medida tanto de ahorro económico, energético y cuidado medioambiental”, aseguró el concejal de Comercio y Vía Pública, Bernardo Jiménez, el pasado lunes durante el anuncio de la adjudicación del contrato.

Un 30% de ahorro adicional

Las luminarias se instalarán en 43 zonas del municipio que han sido seleccionadas por la Concejalía de Vía Pública, que abarcan las principales calles y avenidas de los tres núcleos de Benalmádena. Además, «este contrato de adquisición de lámparas LED incluye la renovación de toda la iluminación del Puerto Deportivo y el parque de la Paloma”, destacó Rodríguez.

Las nuevas luminarias contarán con una aplicación para que los operarios reduzcan la potencia en función del tramo horario, “ya que a determinadas horas de la noche no es necesaria una potencia tan elevada, una mejora que podría suponer un ahorro adicional del 30%”.

Largo proceso

Respecto al procedimiento, éste se ha alargado, ya que se inició hace dos años. En la primera convocatoria, al ser un contrato de más de 600.000 euros, ésta debía permanecer en exposición pública un plazo de 47 días. El problema fue que «en la primera convocatoria se presentaron más de 30 empresas, pero quedó desierto porque ninguna cumplía con los parámetros técnicos exigidos”, detalló Jiménez.

En la segunda convocatoria se presentaron más de 20 empresas, y la oferta ganadora fue impugnada ante el Tribunal de Competencias, lo que alargó aún más el proceso de adjudicación. “Tras desestimarse esta impugnación, pudimos finalmente firmar la adjudicación la semana pasada, con un precio de 600.000 euros, lo que supone un ahorro de 200.000 euros, ya que el contrato salió a concurso público con un presupuesto de partida de 800.000 euros”, explicó Jiménez.

 
 
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