Un mapa georreferenciado que identifica las mejores formas de autoconsumo energético en edificios. No es un proyecto, sino que ya está en marcha y se llama ENERMAP. Esta herramienta permite comparar las medidas llevadas a cabo en otras regiones europeas y estudiar si es posible realizarlas en cada una de las regiones. Por el momento, contiene alrededor de cien buenas prácticas financiadas con fondos públicos, pero no se descartan más incorporaciones.
Las ventajas de tener a disposición esta herramienta residen, primero, en que se pueden observar los proyectos que se han realizado en otras regiones. De este modo, es posible estudiar si existe la posibilidad de transferirlas o replicarlas; segundo, se pueden comprobar las políticas de apoyo existentes en otros países y analizar si sería España, por ejemplo, capaz de implementarlas, o no.
No obstante, este herramienta no se puede modificar, ni permite hacer cálculos. Su función es ubicar las prácticas identificadas en el proyecto en las siete regiones que forman parte del mismo.
Extremadura, comprometida
Llama la atención que en España sólo se puedan comparar edificios de autoconsumo en Extremadura. Sin embargo, eso no significa que sea la única comunidad autónoma que aplica este tipo soluciones. En realidad, el motivo por el que se han identificado sólo edificios de autoconsumo en esta región, en el caso del mapa español, es porque la actividad se ha llevado a cabo en el marco de un proyecto europeo interregional, donde la comunidad autónoma que participa es Extremadura. Es decir, no estaba en el ámbito de este trabajo identificar el resto de edificios de autoconsumo que existe en España.
De hecho, desde ENERSELVES, puntualizan que no consideran que la política de eficiencia energética extremeña sea mejor que en el resto de España. «Aunque Extremadura sí que es una región muy comprometida con la transición hacia una economía baja en carbono, y la eficiencia energética así como la integración de renovables es sus edificios públicos es ahora una prioridad», puntualiza, Rachel Tully, project manager de ENERSELVES.
No obstante, sí es posible que Extremadura gane más presencia en el mapa, ya que la región trabaja en este momento en la integración de energías renovables en muchos de sus edificios, por lo que no descartan que, pronto, se puedan producir nuevas incorporaciones. Y es que Extremadura tiene abierta una línea de actuaciones de eficiencia energética e integración de renovables en edificios.
Una docena de ejemplos en España
De los casi cien ejemplos que podemos encontrar en el mapa, doce se encuentran Extremadura. Entre los ‘elegidos’ se encuentra El Raposo Hotel & Spa, con la instalación de una caldera de biomasa de 220 kW. La vida útil de la caldera es de 20 a 30 años. Cuando se instaló la caldera de biomasa, se utilizaron astillas de madera forestal, pero se ha remplazado por cáscara de almendra debido a las ventajas de esta materia prima.
El coste de la materia prima de biomasa es de 9.900 euros anuales. No obstante, el ahorro mínimo al año alcanza los 38.000 euros, lo que reduce el periodo de amortización a menos de tres años. Además, se evitan la emisión de 550 toneladas de CO2 a la atmósfera.
Otro de los incluidos es el Centro Integral de Desarrollo VillaFranca de los Barros, en este caso con un sistema fotovoltaico, que cuenta con una potencia instalada de 6,25 k/Wp, repartidos en 25 paneles. Los paneles están situados hacia el sur, con una inclinación de 30º, para aumentar su producción.
En total, su producción alcanza los 10.034,38 kW/h al año. Dispone, además, de un sistema de seguimiento y control, que permite manejar de forma adecuada la instalación, la producción y la facturación, una mejora de mantenimiento y adviertencia en caso de fracaso o revisión
Iniciativa, marcada por el momento
Respecto al momento escogido para presentar el mapa, lo cierto es que la iniciativa llega marcada por el proyecto que lo acoge: Interreg Europe, que se acerca al final de su primera fase y el trabajo de identificación ya está hecho. En adelante, «cada región debe definir su plan de acción», explica Tully. Para conseguirlo, matiza la project manager, «es necesario una cooperación interregional para ver qué se puede transferir o no».
No obstante, la project manager de ENERSELVES Project explica que con la reciente eliminación del conocido como ‘impuesto al sol «hay que hacer hincapié en los múltiples beneficios que tiene y en cuáles son las mejores acciones para promoverlos en nuestra sociedad y más concretamente en nuestra región».
Respecto a los criterios para identificar las buenas prácticas más adecuadas a las circunstancias locales y regionales por cada uno de los socios, se escogieron inmuebles en función de las mejoras en cuanto a eficiencia energética e integración de energías renovables. Es decir, la reducción de emisiones de CO2, el ahorro energético, la creación de conciencia entre los usuarios sobre los beneficios de las energías limpias, así como la transferibilidad entre regiones.
Una de las condiciones para formar parte de este mapa era haber recibido financiación pública. De nuevo una puntualización: «Habrá casos muy buenos en el ámbito privado, pero el programa exige que haya financiación pública, al menos en una parte», matiza Rachel Tully.
Recopilación de buenas prácticas
La idea de la creación de este mapa surgió hace un año, según explica Rachel Tully. Su origen hay que buscarlo en otro proyecto de Interreg Europe liderado por Agenex, en concreto de FINERPOL, donde se compartían buenas prácticas de instrumentos financieros para rehabilitaciones energéticas en edificios. Debido al éxito de ese programa, decidieron extrapolarlo a la integración de energías renovables para autoconsumo.
En cuanto a la manera en la que se recopiló toda la información que ha sido necesaria para crear la herramienta, dentro del programa Interreg Europe, ENERSELVES una de las actividades previstas, dentro de la primera fase, era una recopilación de buenas prácticas. En el programa participan siete regiones europeas con el objetivo de promover «mejores políticas para el autoconsumo renovable en edificios», lo que incluye analizar cuáles son las tecnologías con más eficientes. Para ello, se estudiaron varias intervenciones llevadas a cabo en cada una de las regiones. Así, cada socio proporciono a Agenex, líder del proyecto, unas 15 prácticas.