La mitad de todo el consumo de energía renovable procedía de la bioenergía moderna en 2017, tanto como la energía hidráulica, eólica, solar y el resto de fuentes renovables combinadas. La tendencia continuará al alza, pues la biomasa será la renovable que más crecimiento vivirá de aquí a 2023, de acuerdo con los pronóstico Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés).
Si bien las energías renovables continuarán su ascenso en el próximo lustro, hasta cubrir el 40% del crecimiento del consumo de energía global, la gran protagonista será la biomasa moderna. Y es que, de acuerdo con las previsiones de mercado de la IEA, ésta sera la renovable que más crecerá hasta el año 2023. Un hecho que, de acuerdo con la Agencia «subraya su papel fundamental en la creación de una cartera renovable robusta y garantiza un sistema de energía más seguro y sostenible».
En su informe, la IEA lamenta el potencial «sin explotar de la bioenergía- producida a partir de la biomasa- en las industrias del cemento, el azúcar y el etanol», que, en su opinión «es significativo». El crecimiento de la bioenergía en los sectores de la industria, el transporte y la electricidad combinados podría ser tan considerable como el de otras energías renovables en el sector de la electricidad. Una proporción significativa de este potencial se basa en desechos y residuos que ofrecen bajas emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y mitigan las preocupaciones sobre el cambio en el uso de la tierra. Además, la utilización de estos recursos puede mejorar la gestión de residuos y la calidad del aire.
«Gigante ignorado»
Si bien el crecimiento de la energía solar fotovoltaica y la energía eólica continuará en el sector eléctrico, la bioenergía sigue siendo la mayor fuente de energía renovable debido a su uso generalizado en el calor y el transporte, donde el resto de renovables tiene un papel menor, según se desprende de los datos del informe. «La bioenergía moderna es el gigante ignorado en el campo de las energías renovables», lamentó durante la presentación del informe el director Ejecutivo de la IEA, Fatih Birol, quien aconsejó regulaciones » rigurosas» con el objetivo de alcanzar el «máximo potencial» de la bioenergía.
China lidera el crecimiento mundial en energía renovable, lo que se debe, explica la Agencia, a las políticas de descarbonización y el intento de reducir la contaminación local dañina del aire. Por ello, el gigante asiático es el mayor consumidor de energía renovable. De hecho, superará a la Unión Europea en 2023, según las previsiones de la IEA. Sin embargo, Brasil es el país que cuenta con una mayor proporción de energías renovables, y se aproximará al 45% del consumo total de energía en 2023, con una contribución significativa de la bioenergía y la energía hidroeléctrica, vaticina la AIE.
Energía solar fotovoltaica
Por su parte, la energía solar fotovoltaica continúa dominando la expasión de la capacidad eléctrica renovable 178 GW en 2017, lo que le hizo batir otro récord, ya que representó por primera vez más de dos tercios del crecimiento de la capacidad neta de electricidad global. La capacidad fotovoltaica solar fue la que más se expandió, 97 GW, más de la mitad instalada en China. En cambio, la capacidad eólica disminuyó por segundo año consecutivo, y el crecimiento de la energía hidroeléctrica continuó su desaceleración.
De acuerdo con las estimaciones plasmadas en el estudio, la capacidad de la energía solar fotovoltaica aumentará en casi 600 GW, más que el resto de la energía renovable combinada, o hasta el doble de la capacidad total de Japón, alcanzando 1 TW en 2023. China continuará liderando la energía solar fotovoltaica, casi el 40% de la capacidad fotovoltaica instalada global en 2023.
Del informe se desprende que la energía eólica continúa como segundo contribuyente al crecimiento de la capacidad renovable, mientras que la energía hidroeléctrica será la mayor fuente de electricidad renovable para el año 2023. Similar a la previsión del año pasado, se espera que la capacidad eólica se expanda en un 60%. Mientras tanto, impulsado por el progreso tecnológico y las reducciones de costos significativas, la capacidad eólica marina se triplica, con un crecimiento que va más allá de Europa a Asia y América del Norte. Incluso con las tecnologías de energía renovable cada vez más competitivas, las políticas apropiadas y el diseño del mercado son críticos. En un caso acelerado, que supone mayores medidas gubernamentales de apoyo, la expansión de las energías renovables en la electricidad y en el transporte podría ser un 25% mayor.
El uso de las energías renovables, según la Agencia, aumentando más rápido en el sector eléctrico, abarcará casi un tercio de la generación eléctrica mundial total en 2023. No obstante, critican el apoyo «más débil y las barreras adicionales al despliegue» de este tipo de energías, algo que, en su opinión, provoca que el uso de energías renovables se expanda de forma «mucho más lenta» en los sectores de transporte y calefacción.
Incluso con las tecnologías de energía renovable cada vez más competitivas, las políticas apropiadas y el diseño del mercado son críticos, advierten desde la Agencia Internacional de la Energía. En un caso acelerado, lo que supondría mayores medidas de apoyo gubernamental, la expansión de las energías renovables en la electricidad y en el transporte podría ser 25% mayor.