El Cabildo de Gran Canaria ha sacado a concurso la instalación de 988 placas fotovoltaicas en la cubierta de la planta desaladora de Arucas-Moya, una obra incluida en el Plan Renovagua para implantar el uso de energías renovables en 26 instalaciones del Consejo Insular de Aguas.
La instalación fotovoltaica ocupará 1.600 metros cuadrados y tendrá una potencia de 271,7 kW, lo que equivale a generar cada año 416.000 kWh de energía para el autoconsumo de esta dependencia situada en Bañaderos y que suministra agua desalada a los municipios de Arucas, Moya y Firgas, explicó el consejero de Sector Primario, Miguel Hidalgo.
Esta obra, que tendrá un plazo de ejecución de seis meses, se enmarca en el Plan Renovagua, que prevé la inversión de más de 18 millones para dejar de emitir 17.423 toneladas de CO2 a la atmósfera y dejar de importar 4.700 toneladas de petróleo, lo que supone un ahorro de más de 2 millones de euros al año.
Apuesta por las energías renovables
El valor de la licitación, publicado en el Boletín Oficial de Las Palmas, es de 789.580 euros provenientes del Fdcan. Toda la información sobre este pliego y las cláusulas administrativas, cuyo plazo de presentación de ofertas finaliza el 20 de noviembre, están disponibles en la web del Consejo Insular de Aguas.
Esta licitación se suma a la publicada para instalar 380 placas fotovoltaicas en la cubierta de la desaladora de Bocabarranco por un valor de 503.000 euros, una instalación que ocupará 1.000 metros cuadrados y, con una potencia instalada de 99,9 kW, que generará cada año 159.840 kWpor hora de energía destinada al autoconsumo de esta dependencia situada en el municipio de Gáldar.