Con el eslogan «Las familias queremos participar en la producción de energía», la Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica, Anpier, ha empezado a recorrer toda España, con 27 actos programados, para promover la generación renovable y social de la energía, reclamando un papel activo para los ciudadanos. Algo que sólo será posible si un nuevo marco normativo lo permite.
La tercera edición del Camino del Sol arrancó en Madrid el pasado 13 de septiembre y, en total, recorrerá 45 ciudades. En el encuentro, Anpier recordó que las restricciones legales actuales bloquean el acceso de los españoles a la generación en cualquiera de sus modalidades: bien a través del autoconsumo, bien mediante parques sociales que proporcionen energía a la red general.
La voz de 62.000 familias fotovoltaicas
En este sentido, Anpier ha creado una aplicación, disponible en la web del Camino de Sol, que permitirá visualizar el potencial generador de energía fotovoltaica de todos y cada uno de los municipios madrileños de hasta 100.000 habitantes: ahorros posibles por autoconsumo, ahorros municipales e incluso los ingresos que podría obtener cada localidad a través de proyectos sociales de generación. Con esta aplicación, Anpier quiere demostrar que «si la normativa estatal impulsara la generación social fotovoltaica, los pueblos madrileños obtendrían beneficios millonarios».
Durante este Camino del Sol 2017 se escucha la voz de las 62.000 familias españolas que destinaron sus ahorros e hipotecaron sus bienes para apoyar el desarrollo de un nuevo modelo energético en España. Anpier quiere alertar de la gravedad que supone la destrucción del colectivo de esas familias fotovoltaicas. Asimismo, denuncia que no sólo no se impulsa esta modalidad, sino que se expulsa a sus pioneros.