En 2016 se instalaron 55 MW fotovoltaicos en España, de los que el 30% corresponde a proyectos aislados de la red. Según los datos recogidos en el informe anual elaborado por UNEF, el sector fotovoltaico crece a un ritmo lento, lo que ha llevado España a perder posiciones en el ranking internacional. No obstante, el autoconsumo sigue creciendo de forma continua gracias a la reducción de costes.
El Informe Anual 2017 de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), que fue presentado el pasado jueves 20 de julio, la potencia instalada nueva en España durante 2016 ha sido algo mayor que la correspondiente a 2015, 55 MW el año pasado frente a los 49 MW del ejercicio anterior. En total, la potencia acumulada ha alcanzado los 4.729 MW, más de un tercio de la cual corresponde a proyectos aislados de la red.
Apoyo de las Comunidades Autónomas al autoconsumo
Estos datos reflejan el tímido crecimiento del sector fotovoltaico en general, aunque el informe matiza que el autoconsumo sigue creciendo de forma continua a pesar de las barreras económicas y administrativas existentes. La reducción de los costes de los materiales y un mayor apoyo por parte de las Comunidades Autónomas han sido cruciales para que el mercado de las instalaciones aisladas de red haya mostrado una tendencia positiva.
Según explica UNEF, las comunidades autónomas han reafirmado su apoyo al autoconsumo a través de medidas como subvenciones para viviendas y empresas, préstamos para particulares y pequeñas empresas y la deducción por inversiones en instalaciones de autoconsumo. Cataluña, con 86 instalaciones en el registro administrativo de autoconsumo del Minetad, Galicia con 79 y Andalucía con 64 son las que más han apostado por esta tecnología.
Durante la presentación del informe, UNEF ha recordado que el autoconsumo no representa una amenaza a la equidad ni a la sostenibilidad del sistema. En un escenario de previsión de desarrollo del autoconsumo de 250 MW al año, la reducción de ingresos para el sistema sería de 4,1 millones de euros, lo que supondría un impacto del 0,02% en un sistema que en 2016 recaudó más de 16.000 millones de euros.
Fuente de riqueza y empleo
El informe también recoge los datos relativos a la riqueza y al empleo generados por el sector. Según los cálculos de UNEF, en un escenario de aumento anual de la capacidad de generación fotovoltaica de entre 500 MW y 1000 MW, en grandes instalaciones, y de entre 150 MW y 300 MW en pequeñas instalaciones de generación distribuida, se produciría una importante reactivación de la actividad industrial. Esta reactivación supondría la creación de entre 15.700 y 17.000 empleos adicionales hasta 2025, un 140% más de los que existen en la actualidad.
Además, UNEF ha recordado que en 2015 sector fotovoltaico aportó al PIB un total de 2.801 millones de euros y daba empleo un total de 11.491 profesionales. Asimismo, se ha destacado que el sector fotovoltaico es exportador neto, ya que en el periodo 2014-2015 las exportaciones netas alcanzaron los 2.084 millones de euro.
Finalmente, la patronal también ha destacado que existe un saldo positivo entre lo que el Estado recauda por el negocio fotovoltaico en términos de impuestos, tributos y cargas sociales, y las ayudas recibidas, lo que pone de manifiesto que el sector realiza una contribución real a la balanza fiscal nacional.