Los expertos reunidos en el I Congreso Internacional de Madrid Subterra, celebrado recientemente en la capital, coinciden en el potencial de España, y concretamente de la ciudad de Madrid, para luchar contra el cambio climático aprovechando las energías limpias y renovables del subsuelo.
Las altas temperaturas ambientales de nuestro país, en comparación con otras naciones europeas, hacen de España un lugar privilegiado para aplicar tecnologías de recuperación energética del calor terrestre (geotermia) y de las infraestructuras subterráneas (redes de abastecimiento y de saneamiento de agua, y túneles, entre otras).
Expertos internacionales algunos de los más importantes proyectos europeos de aprovechamiento geotérmico y de la energía de las aguas residuales, túneles y otras infraestructuras urbanas.
El profesor alemán Philipp Blum, responsable de Ingeniería Geológica del Karlsruhe Institute of Technology (KIT), ha explicado que el centro de las ciudades suele tener unas temperaturas más altas que el resto del territorio urbano, tanto en la superficie como en el subsuelo. Estas “islas de calor” se han medido mediante satélites durante más de 15 años en las ciudades de Berlín, Colonia y Karlsruhe. En esta última, según ha asegurado el Philipp Blum, estas islas de calor podrían proveer calefacción a 30.000 viviendas y permitiría evitar que se lanzasen a la atmósfera 80.000 toneladas de CO2.
Según los cálculos del experto suizo Beat Stucki, de la empresa Kasag Langnau, en España 1.800.000 viviendas podrían abastecerse de energía para calefacción y refrigeración gracias a las aguas residuales. Madrid es un lugar especialmente bueno para esta tecnología de recuperación, según Stucki, por sus veranos calientes y sus inviernos fríos.
Andreas Hurni, de Ryser Ingenieure AG, presentó el proyecto implantado en un túnel de los Alpes Suizos, cuya generación de calor se explota para subir la temperatura de la tierra y las aguas de piscifactoría de su entorno hasta el extremo de obtener frutas tropicales y de criar peces de aguas calientes.
Peter North, del Ayuntamiento de Londres, ha aportado la experiencia de la capital británica en su proyecto de limitar las emisiones de CO2 utilizando energías residuales procedentes de túneles de Metro y centros de transformación eléctrica.
Por parte de los socios de Madrid Subterra, José Fernández, de Eneres, ha presentado un proyecto piloto realizado en el túnel de Madrid Calle 30 (empresa que también es socia de Madrid Subterra), que ha certificado ahorros energéticos del 85% en la climatización de cuartos técnicos del túnel, recuperando energías del aire y de pozos de drenaje de la infraestructura subterránea.