El Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos (CIRCE) de la Universidad de Zaragoza ha comenzado los trabajos de un proyecto financiado por la Comisión Europea para reaprovechar los residuos leñosos de ciertos trabajos agrícolas. Este mes se ha celebrado la reunión de lanzamiento en la sede de CIRCE, coordinador del proyecto, a donde han acudido más de veinte profesionales de los siete países participantes.
El objetivo general de uP_runing, como se ha denominado a esta iniciativa, es aprovechar el potencial con el que cuentan los residuos leñosos agrícolas para obtener energía, así como demostrar la viabilidad de nuevas cadenas logísticas y modelos de negocio que permitan dicho aprovechamiento. Los estudios se centrarán en los residuos procedentes de podas agrícolas y de renovación de plantaciones y, más específicamente, los procedentes de viñedos, olivos y frutales.
La valorización de los residuos agrícolas como fuente de energía puede suponer un apoyo al sector agrícola a la hora de reducir los costes de la gestión de dichos residuos, ya que su destino es habitualmente la quema o el triturado sobre el suelo de las plantaciones.
Además, uP_runing contribuirá al desarrollo del medio rural, mejorando la competitividad del sector agrícola gracias a la diversificación de sus actividades, permitiendo la aparición de nuevos negocios para empresas locales y ahorros en la factura energética a los consumidores de biomasa.
La explotación de los resultados y su extensión a otras regiones queda garantizada gracias a la variada representación internacional con la que cuenta uP_runinng. Así el consorcio está compuesto por once socios de España, Grecia, Italia, Ucrania, Croacia, Portugal y Francia. Entre ellos se encuentran cooperativas agrícolas, agroindustrias, universidades y centros de investigación, que estarán liderados por CIRCE durante los tres años de ejecución del proyecto. La representación española la completa ASAJA Huesca, que contribuirá al proyecto con su experiencia en el sector agrícola y como dinamizador de este sector. Además el proyecto cuenta con el apoyo de la Comisión Europea, quien ha aportado una financiación de dos millones de euros.