Durante el pasado mes de enero de 2015 se concedió al Ayuntamiento una subvención para llevar a cabo la mejora de eficiencia energética en diversos edificios municipales, a través de tubos led. Este proyecto se ha realizado con la financiación (10 %) y colaboración de la Consejería de Industria, Turismo, Empresa e Innovación y ha sido cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) en un 40 %, aportando el resto el Ayuntamiento de Cehegín. El coste del proyecto ha sido de 51.834,22 €.
Entre los edificios en los que se han sustituido los tubos fluorescentes por tubos LED están el Ayuntamiento de Cehegín, la Casa de la Cultura, el Palacio de la Tercia, Pabellón de Deportes, así como diferentes centros educativos de la localidad.
Ismael Abellán García, Concejal de Eficiencia Energética del Ayuntamiento de Cehegín, ha afirmado que este plan se ha puesto en marcha con el objetivo de mejorar la eficiencia energética de diferentes edificios municipales y ahorrar dinero en el consumo eléctrico; por eso, técnicos del Ayuntamiento de Cehegín realizaron un estudio acerca de cuál sería el resultado de sustituir los actuales tubos fluorescentes de la iluminación de estos edificios por tubos de tecnología LED. Quiero recordar, ha seguido manifestando el Concejal, que la iluminación LED se caracteriza por el largo tiempo de vida útil que posee, por lo que la inversión realizada se recuperaría en un corto periodo de tiempo.
Actualmente la tecnología LED es la forma más eficiente e innovadora de iluminación en la que alrededor del 80% de energía eléctrica se convierte en luz, consumiendo muy poca potencia y por lo tanto, emitiendo muy poco calor. Las bombillas incandescentes tradicionales únicamente convierten el 20% de la energía en luz, perdiendo un 80% en forma de calor.
Además, la luz emitida por el LED es mucho más brillante y nítida que la del halógeno y el fluorescente. Tiene un encendido inmediato, y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Medioambientalmente, los dispositivos LED también presentan ventajas ya que no necesitan ningún gas para encenderse, al contrario que los tubos fluorescentes que funcionan a base de vapor de mercurio, cuyos componentes son nocivos para la salud y el medio ambiente.