Continuando con el impulso generado en la Cumbre Climática (COP 21) de París, los consejeros delegados de las principales compañías energéticas europeas han manifestado su compromiso explícito con un acuerdo global en la lucha contra el cambio climático. Es hora de actuar contra el calentamiento global, una amenaza de efectos catastróficos que podría alterar para siempre el delicado equilibrio del que depende la vida en nuestro planeta. En ese sentido, el esfuerzo para evitar que la temperatura atmosférica aumente en más de 2°C se antoja una tarea absolutamente imperativa y compartida por todos. El Grupo Magritte reclama un acuerdo internacional de largo alcance en materia climática en la cumbre COP 21, del que salga un marco de referencia general a largo plazo que conjugue visibilidad y coherencia en las políticas sobre el clima. Junto a ello se ha de reconocer la importancia de una señal sobre el precio de las emisiones de carbono, un mecanismo que garantice unas reglas de juego homogéneas a escala mundial.
Necesidad de restaurar el malogrado mercado europeo de emisiones de carbono – Durante los últimos dos años, los consejeros delegados han expresado su inquietud por la pérdida de credibilidad del mercado de emisiones de carbono en Europa. Como participantes activos en su reforma, valoran muy positivamente los acuerdos alcanzados sobre backloading y la Reserva de Estabilidad del Mercado (MSR). Estos acuerdos constituyen importantes pasos hacia la necesaria reestructuración del mercado europeo de emisiones de carbono.
Además de mostrarse favorable a estas medidas, el Grupo Magritte hace hincapié en la necesidad de contar con una señal reforzada del mercado de emisiones de CO2 europeo, a fin de proporcionar a la industria un escenario visible para sus inversiones a largo plazo tanto presentes como futuras. Esta es una condición indispensable para restablecer la confianza en el sistema y lograr que surta todos sus beneficios potenciales en las políticas sobre el clima.
Compromiso concreto de la industria energética para combatir el cambio climático – Los consejeros delegados están comprometidos con un futuro energético bajo en carbono y con la inversión en tecnologías bajas en carbono y eficientes que contribuyan a alcanzar los objetivos sobre el clima. La investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación tendrán un papel clave en el proceso de transición hacia un modelo competitivo bajo en carbono, que está tornándose posible gracias al desarrollo de proyectos y productos concretos como tecnologías smart, renovables, almacenamiento de energía, respuestas basadas en la demanda, tecnologías power to gas, modernización de las redes de distribución, infraestructuras de transporte de combustibles alternativos, etc. A este respecto, la cumbre COP21 representa una oportunidad para mostrar y compartir las mejores prácticas.