El hotel White Island, ubicado en la playa d’en Bossa, en Ibiza, ha sustituido su antiguo sistema de producción de agua caliente sanitaria basado en calderas de gasoil por una innovadora instalación de refrigeración natural que supondrá un consumo energético tres veces menor. La reforma ha sido llevada a cabo por el grupo de compras Cealsa (Central Almacenes Saneamiento S.L.).
En el marco de una reforma integral de la climatización del hotel, Cealsa ha sustituido el uso de hidrocarburos por un sistema hidráulico que produce agua a alta temperatura (hasta 90º) mediante equipos de CO2 (R-744) que únicamente consumen electricidad. Los equipos de CO2 no solo entregan agua caliente para el uso del hotel, sino que, además, entregan agua fría al colector de clima, en donde otros equipos de refrigeración condensados por agua de mar, se encargan de atender la demanda de frío. Esta aportación de frío por parte de los equipos de CO2 es totalmente gratuita, pues se trata de una recuperación total de frío.
El nuevo sistema combina, por lo tanto, producción de frío y agua caliente sanitaria, con el objetivo de proporcionar el máximo confort de la manera más sostenible.
“Estamos ante la gran revolución que implica ya a día de hoy el reemplazo de los refrigerantes sintéticos con serias consecuencias sobre el medio ambiente, en términos de destrucción de capa de ozono y efecto invernadero. Las empresas más innovadoras apuntan hacia el uso del aire como fuente de energía y el agua como fluido caloportador”, señala Jesús Pérez, director comercial de Servicios Palau y presidente de Cealsa.
Cealsa asegura que la inversión realizada por el hotel tendrá retorno en menos de dos años y pronostica que el sector realizará instalaciones cada vez más grandes de esta tecnología puntera.