Los remanentes de tesorería que el Ayuntamiento de Almassora obtuvo al cierre del ejercicio 2014 permitirán continuar la aplicación de medidas de eficiencia energética en el alumbrado público que desarrolla desde hace años el consistorio. Así lo ha confirmado el alcalde de Almassora, Vicente Casanova, quien ha anunciado la reserva de 300.000 euros para avanzar en la aplicación de mejoras en los sistemas de alumbrado público. El objetivo es el establecido en el Pacto de Alcaldes de la Unión Europea, suscrito el 4 de mayo de 2010 en Bruselas, que pretende obtener en 2020 un ahorro del 20% en gasto energético y, con él, un ahorro del 20% en emisiones de CO2 a la atmósfera
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La cuantía prevista establece dos grandes acciones. Por un lado, se prevé invertir 150.000 euros en el casco urbano, mejorando la eficiencia del alumbrado público. Por otro lado, una actuación integral en el casco antiguo de la Vila con la sustitución de las actuales luminarias por otras de tipo led. “Para este proyecto hemos previsto una inversión de 150.000 euros”.
La intervención pretende generar ahorros económicos y reducir las emisiones. El objetivo es “instalar lámparas de menor intensidad, mejorar regulación e incorporar el automatismo que lo permita”. “En la Vila, tal y como explicamos a los vecinos, queremos implantar un tipo de iluminación que no nos haga perder luminosidad, pero sí que gane en eficiencia y practicidad”.
Para ello, la tecnología led que la ingeniería municipal ha previsto para el sector contempla la reducción de los consumos, que pasarían de las lámparas actuales, de 150 watios, a los leds, de 50 watios, “sin que ello comporte franjas de sombras y pérdida de luz”. De hecho, “estas es una condición básica para la implantación de estos sistemas. Sabemos que el led es muy direccional, por ello se estudia un cambio del farol que evite las sombras y que cree una continuidad en la iluminación”.
A esta mejora se sumaría la capacidad de regulación del sistema. Los leds nos permitirían regular la iluminación que en cada momento requiere la Vila, no ya por sectores o calles, sino por lámpara
. Una circunstancia que será de gran utilidad en momentos puntuales, porque si por ejemplo los vecinos de determinada calle realizan una fiesta, como es el caso de Sant Antoni, se puede potenciar la luz en este tramo de vía mientras en el resto del casco antiguo se aplica una intensidad inferior
. Sin duda, “un avance, tal y como coincidieron los vecinos en apuntar”.