El informe presentado por Greenpeace: Hoja de ruta energética para Europa: hacia un suministro independiente y sostenible concluye que unos objetivos ambiciosos y vinculantes en energías renovables y eficiencia energética podrían reducir la importación de energía en un 45% más para 2030 que si los Estados miembros se limitan a los propuestos por la Comisión Europea.
La Comisión Europea propone los siguientes objetivos para 2030:
- Una reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en un 40%
- Alcanzar una cuota de energías renovables del 27%.
Sin embargo, el informe de Greenpeace deja claro que la Unión Europea perderá una gran oportunidad para avanzar de verdad hacia su independencia energética si se limita a esos objetivos. El documento, redactado con la colaboración de expertos externos a la organización ecologista, demuestra que un mayor compromiso climático equivale a una mejora macroeconómica y de creación de empleo. Las principales metas que propone Greenpeace para conseguirlo son:
- Alcanzar una cuota de renovables en el mercado energético del 45% para 2030
- Un 40% de ahorro energético (en comparación con 2005)
- Un 55% de reducción de emisiones de GEI (en comparación con 1990).
Esto representaría una reducción del 35% en las importaciones de gas y un recorte del 45% en las importaciones de petróleo más que el propuesto por la Comisión. Además, la necesidad de importaciones de carbón cesarían por completo antes del final de la próxima década.