Consumur reclama que se ponga freno a la pobreza energética

La Asociación Murciana de Consumidores y Usuarios, Consumur, reclama a las administraciones públicas que establezcan planes para luchar contra la pobreza energética, mediante acciones encaminadas a adecuar el parque inmobiliario, el establecimiento de precios razonables de la energía adaptado a los ingresos y la garantía del suministro a familias y personas en situaciones desfavorecidas. Así mismo, Consumur se ha sumado a la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético.

La pobreza energética es un problema que afecta cada vez a más personas en el Estado español. De acuerdo a los datos de 2012 del Instituto Nacional de Estadística, uno de cada cinco hogares no han podido mantener condiciones mínimas de temperatura en invierno, debido al aumento de precios de la energía, la bajada de ingresos en los hogares y la mala calidad de las edificaciones con pésimo aislamiento térmico.

Los datos de la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística relativos al 2012 desvelaban que un 17,9 % de los hogares españoles no pudieron mantener temperaturas adecuadas en invierno y un 24,8 % de los hogares no consiguieron hacerlo en verano. Las estimaciones apuntan que durante ese mismo año se produjeron 1,4 millones de cortes de suministro eléctrico por impago.

Ante esta situación, Consumur denuncia el incremento continuado en la factura eléctrica, propiciado por una normativa que blinda los beneficios de las grandes empresas del sector en detrimento de los intereses de la ciudadanía.

La organización pide una profunda reforma del sector eléctrico, para acabar con el problema del déficit de tarifa y estabilizar los precios, reforma que debería ir precedida de una auditoría de costes del sector, de tal forma que prime el interés general sobre los intereses de las principales empresas eléctricas que conforman un oligopolio con gran influencia sobre el poder político y los medios de comunicación.

Es necesario también incidir en medidas de ahorro y eficiencia así como en la sustitución progresiva de fuentes fósiles por renovables. Los combustibles fósiles son muy contaminantes y tenemos que importarlos, mientras que las energías renovables son limpias, más baratas siendo su coste predecible.

Cabe precisar que esta situación de pobreza energética no afecta solamente a lo hogares, si no que cada vez más alcanza a otros estamentos, como ayuntamientos, instituciones públicas, centros hospitalarios, educativos, así como al sector industrial y empresarial que cada vez más se ven obligados a reducir su actividad, ante la dificultad para hacer frente a la factura energética.

Consumur recuerda que el acceso a la energía debe considerarse como un servicio básico, ya que ésta es imprescindible para un buen desarrollo personal, social y económico. Se ha de primar esta vocación de servicio público, democrático y transparente y uno una mera forma de lucro personal del sector energético.

 
 
Patrocinio Plata
Patrocinio Bronce
Salir de la versión móvil