Grupo CMC ha desarrollado una solución corporativa de captura, almacenamiento y análisis de consumos eléctricos para optimizar y controlar los costes de energía en tiempo real, tanto en instalaciones localmente como de forma remota. La solución, entre otras capacidades, permite conocer con antelación el importe de la factura eléctrica, detectar desviaciones en el consumo o realizar facturas paralelas para detectar errores de cobro por parte de los suministradores.
La nueva solución, denominada Building Energy Saving, es un sistema modular orientado a la optimización del consumo eléctrico mediante el análisis de datos y permite también realizar planificaciones o proyectos de consumo, conociendo en todo momento, y en tiempo real, sus grados de cumplimiento o sus desviaciones y por qué razones. Según CMC, la nueva solución puede permitir reducir los costes de la factura eléctrica entre un 15% y un 30%, dependiendo del punto de partida.
La solución captura datos de cualquier tipo de dispositivo de medición (contadores, data-loggers locales o equipos de medida (BMS) y los envía a un servidor dedicado para su almacenamiento y análisis. Building Energy Saving supervisa y analiza la información en tiempo real y es capaz de determinar, por ejemplo, tendencias de consumo, desviaciones, anomalías, etcétera. La solución permite también incorporar de forma automática las facturas electrónicas que emiten las compañías eléctricas.
También está planificado incorporar el análisis de otro tipo de consumos energéticos: gas o energía térmica. Toda esta información se maneja a través de herramientas gráficas, pudiendo realizar cálculos previos de la facturación mensual en consumo eléctrico. La solución permite elaborar facturas paralelas para su comparación con la factura de la compañía eléctrica y con el objetivo de detectar posibles errores en los importes.
Analiza también el uso de los periodos tarifarios, potencias contratadas y otros parámetros, permitiendo hacer mejoras en los contratos y establecer la contratación óptima para cada instalación.
Por otra parte, la capacidad de BES también es aplicable para realizar comparaciones entre instalaciones según tipos o, por ejemplo, zonas geográficas. De esta forma detecta también ineficiencia en el consumo energético dependiendo del tipo de edificio y del uso al que esté destinado: oficinas, industrial, residencial, etc. Siendo una herramienta muy útil en las grandes corporaciones para detectar el mal uso de la energía.
El sistema incluye herramientas de análisis predictivo y alarmas vía e-mail y SMS que avisan sobre posibles desviaciones de, por ejemplo, un presupuesto estimado de consumo. Evitando de esta forma que las acciones orientadas a mejorar el ahorro se realicen “a posteriori” una vez que ya se ha incurrido en el gasto energético.