Madrid acogió los pasado 23 y 24 de octubre el I Congreso de Edificios Inteligentes, que abordó el concepto del edificio inteligente desde un punto de vista integral y multidisciplinar para acelerar y potenciar el uso de las mejores soluciones y sistemas tecnológicos en la edificación.
Schneider Electric participó en el encuentro aportando su experiencia y conocimiento en el campo de la gestión de edificios. Bajo el título “La Gestión Energética de un Edifico Inteligente”, Javier Orellana, Responsable de Servicios Energéticos de Schneider Electric, ha impartido hoy una ponencia en la que ha analizado la importancia de la figura del gestor energético para lograr una mayor eficiencia en los inmuebles. Entre las misiones de esta nueva figura destaca el desarrollo de un Plan de Eficiencia Energética, su seguimiento y monitorización. Además, el asesor energético se encarga de analizar los datos de energía, reportar el consumo energético y asesorar acerca de las acciones correctivas pertinentes para conseguir los objetivos de eficiencia energética definidos. De esta manera, más allá de las certificaciones verdes, las etiquetas energéticas y el uso de la tecnología, una buena gestión energética es la responsable del desarrollo de edificios verdes e inteligentes de alto rendimiento capaces de ofrecer unos resultados sostenibles a lo largo de toda la vida del inmueble.
Como reflejo de las herramientas disponibles en el ámbito de la eficiencia energética, Orellana también ha tratado en su intervención las particularidades de los diferentes sistemas de gestión de un edificio inteligente. En primer lugar, un BMS (Building Management System) permite configurar y automatizar un edificio de manera que los administradores de instalaciones hagan un trabajo más eficiente y los ocupantes ganen en eficacia, confort y seguridad. De esta manera se logra simplificar la automatización de los controles de temperatura, de la iluminación, de los accesos, o de los circuitos de video vigilancia de un edificio según las directrices y estrategias de eficiencia energética, confort y/o seguridad establecidas. Por otra parte, un EMS (Energy Management System) se centra en facilitar la adquisición, procesado y análisis de diferentes fuentes de datos con el propósito de cuantificar los parámetros energéticos como, por ejemplo, la distribución de consumos, las emisiones de gas de efecto invernadero o los costes energéticos para, así, facilitar la toma de decisiones a nivel energético y control técnico.
Durante dos días, Madrid se ha convertido en el punto de encuentro de los profesionales involucrados en el desarrollo de los edificios inteligentes. Así, ingenieros, arquitectos y empresas de servicios energéticos, entre otros, se han dado cita para difundir el conocimiento sobre las temáticas relacionadas con la gestión de inmuebles y potenciar una edificación energéticamente más eficiente, funcional, segura y accesible, reforzando la integración entre los edificios inteligentes y la ciudad.