La biomasa ya no sólo es una alternativa energética fiable, ahora además constituye un mercado seguro y una atractiva oportunidad de negocio para los profesionales del sector forestal, fabricantes, productores e instaladores de equipos del ámbito de la climatización.
La certificación de la eficiencia energética abre interesantes oportunidades para las instalaciones de biomasa, tanto para la sustitución de equipos antiguos alimentados con gasóleo o carbón, como para las nuevas edificaciones que se plantearán en términos de eficiencia energética. La biomasa se introducirá en viviendas y edificios como una parte más de un plan integral de rehabilitación. La publicación del Plan Estatal de Fomento del Alquiler de Viviendas, la Rehabilitación, Regeneración y Renovación Urbanas (2013-2016) y la certificación energética obligatoria en viviendas nuevas o existentes en venta o alquiler a partir del 1 de junio, han relanzado el uso de la biomasa como solución energética eficiente, sostenible y más barata. A este revulsivo se unen líneas de ayuda y financiación vigentes del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), como los programas BIOMCASA II, GIT, y FONDO JESSICA IDAE y la próxima publicación del Programa de Rehabilitación Energética de Viviendas dotado con 25.000.000 € sólo para instalaciones térmicas de biomasa. También avalan y financian actuaciones que fomentan la biomasa los Proyectos Clima, las Líneas ICO para la Rehabilitación de Viviendas y Edificios 2013, o las ayudas directas de diferentes Comunidades Autónomas.
En este sentido, Expobioenergía ofrece el mayor escaparate especializado en tecnología de la biomasa de Europa. Los instaladores son conscientes del negocio que ofrece el montaje, puesta en funcionamiento y el mantenimiento de calderas de biomasa en edificios públicos, comunidades de vecinos e instalaciones industriales de grandes y medianos consumidores térmicos, pero también en el ámbito doméstico.