Extremadura ha dado un paso adelante en la apuesta del Gobierno extremeño por la eficiencia energética, con la formalización del Fondo Jessica-Fidae, Fondo de Inversión en Diversificación y Ahorro de Energía constituido por el IDAE y el Banco Europeo de Inversiones. En el caso de la comunidad autónoma, tiene una dotación de 20,4 millones de euros, que va a permitir hasta el año 2015 financiar proyectos de eficiencia energética y energías renovables en los sectores de industria, transporte, edificios e infraestructuras de servicios públicos relacionadas con la energía en unas condiciones muy favorables.
Así lo ha anunciado el director general de Incentivos Agroindustriales y Energía, Juan José Cardesa, en el I Congreso Transfronterizo de Buenas Prácticas en Gestión Sostenible de los Recursos, celebrado en Plasencia. Se trata de la “incorporación de instrumentos financieros que permitan facilitar el acceso al crédito y mejorar las condiciones de financiación de las actuaciones en materia de ahorro y eficiencia energética que se vayan a acometer tanto por los ciudadanos como por las empresas privadas o las propias entidades públicas”, ha explicado.
Cardesa ha destacado la política que en este sentido lleva a cabo la Administración regional, y apela a la concienciación de todos para ahorrar energía. Las ciudades y las poblaciones, ha dicho, son responsables de más del 50% de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero asociadas al uso de energía en las actividades humanas.
Además, la reducción de la factura energética de un municipio mediante la implantación y desarrollo de un plan de ahorro y eficiencia energética “puede constituirse en una herramienta muy potente y muy eficaz para la contención del gasto público”.
Por ello, las comunidades autónomas y los ayuntamientos “debemos ser quienes primero estemos dispuestos a hacer de la eficiencia energética una prioridad”, ha insistido el director general.
En este sentido, ha subrayado las medidas puestas en marcha por el Gobierno extremeño, tales como el alumbrado público en Mérida y Malpartida de Cáceres, que próximamente se hará también en Cáceres; la contratación de los servicios energéticos de la sede de la Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía, que va a permitir un ahorro anual del 10% en materia energética; así como las próximas licitaciones de servicios energéticos del edificio administrativo de Morerías en Mérida, y un paquete importante de centros educativos en la provincia de Cáceres. Asimismo, se han dado ya los primeros pasos para aplicar esta política de ahorro energético en más de 40 centros de salud y hospitales públicos.
Para todo ello, ha manifestado Cardesa, “va a ser clave afianzar la voluntad política a favor de la eficiencia energética, interiorizando de manera definitiva que la eficiencia energética no es una carga para las finanzas públicas, sino todo lo contrario, es una manera de cuidar nuestro entorno, de ahorrar dinero y también un vector de creación de empleo y riqueza”.