Ante las profundas modificaciones normativas a las que se enfrenta el sector de la edificación, Green Building Council España valora positivamente cualquier iniciativa que fomente la rehabilitación.
En este sentido, considera que el borrador del Proyecto de Real Decreto del Plan Estatal de Vivienda, Alquiler, Rehabilitación, Regeneración y Renovación Urbanas 2013-2016 debería convertirse en el eje de la acción pública que determinase objetivos cuantificados de objetivos cuantificados a medio y largo plazo (reducción de emisiones de ozono, consumos energéticos, etc…) que permitan orientar el sector de la edificación acorde con una “visión-país” ambiciosa.
Para GBCe, los retos ambientales que la sociedad española debe afrontar, suponen un eje básico en la necesaria transformación de la economía española hacia una economía competitiva. Estos retos tienen una definición específica a escala europea pero, nuestro país no ha sabido siempre reconocerlos como una oportunidad sino como un obstáculo, difiriendo su transposición, su aplicación y su aprovechamiento como palanca de cambio del sector y de la economía nacional.
En ese sentido, GBCe cree que el Plan de Vivienda, más allá de su papel tradicional de ayuda al acceso a la vivienda, debe transformarse en un eje vertebrador de la acción pública en el parque construido, organizado sobre un nuevo marco innovador, y alineado con los objetivos y la experiencia europea
Del mismo modo, la asociación estima que el Plan de Vivienda debe hacer una lectura de los instrumentos disponibles –Inspección Técnica de Edificios, Certificación energética, CTE,…- para orientarlos hacia una acción integrada en el ámbito de la regeneración urbana y la rehabilitación.
GBCe cree que la cuantificación de las ayudas encaja en la hoja de ruta propuesta por el Grupo de Trabajo de Rehabilitación (GTR) en el Plan de Acción propuesto en su informe de 2012, si bien se echa de menos un incentivo más claro hacia los proyectos de actuación a escala urbana, completamente necesarios para activar el mercado de la rehabilitación en España.
Por otro lado, el Plan de Vivienda supone la oportunidad de definir los objetivos sociales que debe afrontar el sector, como el acceso a la vivienda y el riesgo a perderla, la pobreza energética, la adecuación a los cambios poblacionales, los problemas de segregación urbana, el deterioro de los centros históricos, el acceso a los servicios, etc.
El texto del borrador del Plan de Vivienda que está circulando no contiene tampoco una estimación de los volúmenes totales de inversión ligados a la reforma normativa, lo que es completamente necesario para hacer una evaluación certera de la eficacia del proyecto propuesto.
En conclusión, GBCe está convencido que la acción de la Administración Pública en materia de vivienda debe estar consecuentemente coordinada y orientada hacia la definición y el alcance de estos objetivos y que el Plan de Vivienda debe tener una ambición que supere el mero cumplimiento de unos objetivos en materia de acceso a la vivienda para plantearse unos más amplios que permitan definir el nuevo sector de la edificación.