El Ayuntamiento de Pamplona está valorando la posibilidad de ampliar el número de calderas de biomasa para mejorar la eficiencia y ahorrar en el gasto energético en los edificios municipales, después de comprobar que suponen un ahorro del gasto energético de un 40% respecto al uso del gasoil.
El concejal delegado de Proyectos y Conservación Urbana del Ayuntamiento de Pamplona, José Javier López ha presentado, junto con Óscar Esquíroz, director de Conservación Urbana, el análisis realizado sobre el uso de fuentes de energía renovables en edificios municipales. López ha explicado que el uso de calderas de biomasa en edificios municipales "podría suponer un ahorro para el Ayuntamiento de Pamplona de más de un 40% respecto al uso del gasoil y de alrededor del 10% en relación con el gas".
De hecho el concejal ha subrayado que la intención del Ayuntamiento es de estudiar la posibilidad de sustitución progresiva de las calderas que emplean gasoil como combustible y sin descartar en la renovación el recurso a calderas de biomasa, a la vista de la positiva experiencia registrada en la operación y mantenimiento en las cuatro instalaciones municipales dotadas con este tipo de calderas. Las calderas de biomasa ya suministran energía a edificios e instalaciones con una superficie de más de 10.500 metros cuadrados para calefacción, agua corriente sanitaria o llenado de los vasos de las piscinas cubiertas de San Jorge.
Según los datos recogidos por el Ayuntamiento, la cantidad de biomasa consumida por las calderas ya en funcionamiento asciende a 126,59 toneladas. La comparación del coste de esa biomasa (228 euros por tonelada) y el del combustible en gasoil, al precio actualmente pagado por el ayuntamiento (876,282 euros/m3), para producir teóricamente la misma cantidad de calorías, posibilitaría un ahorro del 40% si todas las calderas fueran de biomasa.
Lo mismo ocurre con el gas, aunque con menor ahorro, un 10%, si se comparara el coste del consumo de biomasa en los cuatro edificios que se nutren de esa energía con el precio del gas que paga el Ayuntamiento (0,549 euros/m3).
Comprobados los ahorros económicos y la eficiencia energética, el Ayuntamiento de Pamplona va a estudiar desde un punto de vista económico y de sostenibilidad la posibilidad de sustituir progresivamente las actuales trece calderas de gasoil ubicadas en Casa Consistorial, polideportivos de Orvina, Ermitagaña y José María Iribarren, colegio Nicasio Landa, Casa Irujo o Civivox Jus la Rocha, entre otras, para valorar la instalación de alguna o algunas unidades más de biomasa.