La modernización de los sistemas lumínicos en ciudades es uno de los retos principales para la Unión Europea. Con el objetivo de contribuir al ahorro energético y reducir las emisiones contaminantes a la atmósfera, se ha decretado una retirada progresiva de las lámparas incandescentes en los hogares y calles europeos. El Ejecutivo comunitario calcula que esta medida permitirá alcanzar un ahorro anual de 40.000 millones de kilovatios hora (KWh) y una reducción de 15 millones de toneladas CO2 al año, a partir de 2020.
Muchos hogares ya han adaptado sus instalaciones a este tipo de bombillas. Desde el punto de vista institucional, poco a poco empresas y administraciones, especialmente los ayuntamientos, van adoptando medidas para cambiar las antiguas lámparas incandescentes por los sistemas de iluminación LED. Sin embargo, el amplio coste de remplazamiento del alumbrado público les hace difícil adoptar este tipo de medidas.
Conscientes de esta situación, OSRAM ha desarrollado un módulo estándar compatible con una gama muy amplia de luminarias de alumbrado exterior. Los módulos Decorative Street Lighting (DSL) permiten ser instalados en una amplia gama de luminarias instaladas en nuestros municipios. Así, la mayor parte de fuentes lumínicas pueden ser sustituidas por LED.
Los módulos DSL constan de seis placas con LED de alta potencia de OSRAM dispuestas en 360º que permiten el direccionamiento de la luz en todas direcciones. Los circuitos de las placas pueden conectarse y desconectarse de manera individual. De esta forma se pueden realizar encendidos y apagados selectrivos según se necesite, con el fin de ahorrar energía. Esto nos proporciona diferentes distribuciones de luz simétricas en zonas abiertas y asimétricas en fachadas. Si una de las placas está orientada hacía una fachada, ésta puede ser apagada para reducir el consumo eléctrico. Además, gracias al sistema de control, se puede ajustar automáticamente el flujo luminoso dependiendo de las diferentes franjas horarias a lo largo del día. Puesto que los LED ofrecen mejor reproducción cromática que la mayoría de las lámparas convencionales, la iluminación de diferentes zonas se conseguirá de forma más eficiente.
Tecnología lumínica LED
Los LED (diodos emisores de luz) tienen una vida útil cercana a las 50.000 horas (casi seis años funcionando de continuo las 24 horas del día) y un consumo hasta ocho veces inferior al de las lámparas incandescentes. Además, no contienen tungsteno ni mercurio, altamente contaminantes, incorporan en su fabricación materiales reutilizables y reducen hasta diez veces las emisiones de CO2 a la atmósfera.