Según un estudio de la organización americana Centro para el Desarrollo Global (CGD), el aumento de las emisiones de carbono debido a una mayor demanda de energía en los países en vías de desarrollo supera el progreso de naciones como China y Estados Unidos para mejorar la eficiencia energética.
En un intento de bajar costos, numerosas naciones en los últimos años han reducido o renovado sus plantas de carbón, que entre las principales formas de energía es la que más emite carbono, considerado responsable del incremento de la temperatura global.
Pero una base de datos preparada por el Centro para el Desarrollo Global (CGD, por sus siglas en inglés), un grupo de pensamiento estratégico (think tank) de Washington, halló que los mayores esfuerzos en eficiencia realizados no compensan las emisiones por la generación de electricidad, que crecieron un 13,6% globalmente de 2004 a 2009.
En los países en desarrollo, los dos mayores emisores del planeta, China e India, disminuyeron la intensidad de sus emisiones de carbono en casi un 10% durante ese período. En Estados Unidos, la baja se situó en un 7,3%.
"Reducir la intensidad de las emisiones de carbono en un 10% en cinco años es loable, pero me pregunto si no estamos atrapados en una tendencia en la que todo el mundo se centra en pequeñas ganancias en eficiencia que exprimimos de aquí y de allá", afirmó Kevin Ummel, director de proyectos de la base de datos de la organización Monitoreo del Carbono para la Acción (CARMA, por sus siglas en inglés).
"Al final esto palidece frente a la tasa de consumo. En términos de clima estamos perdiendo la batalla, incluso cuando hemos logrado pequeñas ganancias aquí y allá", dijo.
En total, los países de altos ingresos redujeron la intensidad de sus emisiones de carbono en un 5,5% de 2004 a 2009, lo que supera el crecimiento de 2,7% en el consumo eléctrico, según la base de datos.
Pero en el mundo en vías de desarrollo, el descenso en la intensidad de emisiones de carbono de 1,3% se vio superado por un crecimiento de un 34% en el consumo de electricidad.
A pesar de los progresos de grandes economías como China e India, otros países en vías de desarrollo avanzan en la dirección opuesta en cuestiones de intensidad de carbono, según la base de datos.
Las emisiones de carbono por unidad de energía en Pakistán aumentaron en un 18,6% de 2004 a 2009. La intensidad de carbono aumentó un 18,1% en Turquía, 16,9% en Malasia, 14% en Argentina, 10,3% en Irán y un enorme 44,8% en Kuwait, uno de los grandes productores de petróleo.
Las tasas de crecimiento económico en China e India se han enfriado con respecto a sus fuertes niveles en años recientes. Pero el impacto en las emisiones no está claro, puesto que gran parte de las emisiones de carbono procede de una creciente clase media que busca electrodomésticos otrora inalcanzables, como refrigeradores o aire acondicionado. "Sinceramente no creo que nadie vea que la curva se reduzca en un futuro cercano", afirmó Ummel sobre el crecimiento de las emisiones de carbono.
El dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero captan parte de los rayos solares que atraviesan la atmósfera, lo que genera un calentamiento. La Tierra ha registrado 13 de sus años más calurosos en la última década y media.
El borrador de un nuevo tratado climático impulsado por la diplomacia de la ONU se ha visto ralentizado por la disputa entre los países ricos y los que están en vías de desarrollo. China se ha comprometido a bajar la intensidad del uso de carbono, pero afirma que no es realista reducir las emisiones netas.
En Estados Unidos las propuestas para reducir emisiones han fracasado ante la resistencia política. Pero datos recientes muestran que las emisiones estadounidenses cayeron a su nivel más bajo en los últimos 20 años en los primeros tres meses de 2012, como consecuencia de un mayor consumo de gas natural y de un invierno más cálido, que redujo la necesidad de calefacción en la mayor economía del mundo.