Según las estimaciones de Daikin, la Bomba de Calor, gracias a su alto rendimiento y al uso de la energía gratuita del aire, es capaz de generar el mismo calor útil que los sistemas de calefacción tradicionales (caldera de gas, gasoil y eléctrica), con un consumo de energía un 30% menor y, por lo tanto, con un mayor ahorro económico, además de tener un menor impacto ambiental.
Según un reciente estudio del IDAE, la calefacción es responsable del 47% del consumo energético de los hogares españoles, seguido de los electrodomésticos y el agua caliente. En este escenario, la Bomba de Calor surge como una alternativa a la calefacción tradicional de gas y de gasóleo, ya que proporciona un mayor ahorro energético y, en consecuencia, un mayor ahorro de costes a final de año.
De acuerdo con los datos de la compañía Daikin, la Bomba de Calor permite ahorrar hasta 1.086 euros al año en calefacción en un hogar medio. Este promedio se ha obtenido de una comparativa realizada entre el gasto en kw/h de la Bomba de Calor (concretamente de un sistema Daikin Altherma) frente a otros sistemas convencionales de calefacción (calderas de gas, gasoil y eléctrica) para una vivienda media de unos 100m2 situada en Madrid.
En concreto, y tomando esta referencia, el consumo de un sistema de calefacción basado en Bomba de Calor (Daikin Altherma) es de 392 €/año, frente a los 696 €/año de la calefacción de gas natural, los 1.241 €/año de la calefacción de gasoil y los 1.478 euros al año de media de una calefacción eléctrica. De tal forma, con la Bomba de Calor puede conseguirse un ahorro en calefacción de un 44% en relación con el gas natural, de un 68% frente a la caldera de gasoil y de un 73% en comparación con la calefacción eléctrica.
Esto es posible debido a que los sistemas de climatización de Bomba de Calor permiten ahorrar hasta un 30% de energía, gracias a su alto rendimiento en relación con otros sistemas de calefacción tradicionales. Igualmente, la utilización de nuevos refrigerantes de última generación que pueden trabajar en ambientes más fríos, como es el caso del R410A, y la incorporación de la tecnología Inverter, han contribuido a aumentar el rendimiento de estos sistemas.
Por otro lado, cabe subrayar que el calor generado por la Bomba de Calor es considerado como energía aerotérmica, una energía renovable y totalmente gratuita procedente del aire exterior. La Bomba de Calor transforma esta energía en calor útil para conseguir una temperatura confortable en el hogar, incluso en los días más fríos de invierno. Todo ello, con la ventaja de ser un sistema polivalente, ya que además de calefacción, proporciona refrigeración para climatizar el hogar a una temperatura adecuada durante los meses de mayor calor.
En función del modelo y las condiciones, una Bomba de Calor genera unos 3 kWh de calor útil por cada kWh de electricidad que consume. Esto significa que aproximadamente dos tercios del calor necesario para calentar la vivienda es totalmente gratis. Igualmente, se estima que una Bomba de Calor calienta con una eficiencia de hasta cinco veces superior a la de un sistema de calefacción tradicional, basado en combustibles fósiles o energía eléctrica, incluso con temperaturas realmente bajas (-25ºC de temperatura exterior). Y todo ello, sin emisiones directas de CO2 a la atmósfera.
Por último, cabe destacar que la Bomba de Calor resulta muy fácil de integrar con otras formas de energía renovable, como puede ser la solar térmica. De este modo, se aprovecha la energía gratuita del sol para transferir el calor (mediante unos colectores de alta eficiencia que transforman la radiación solar de onda corta en calor) al depósito de agua caliente sanitaria, aprovechando esta energía y maximizando de este modo la eficiencia energética de la Bomba de Calor.
De esta manera, los ahorros, tanto económicos como en emisiones de CO2 a la atmósfera, se disparan, convirtiéndose en un sistema de altísima eficiencia.